
JUAN CARLOS LAYTON
LA PATRIA | MANIZALES
El reconocimiento y la imagen que dejó el Almacén Exclusivo, firma que estuvo en la región por cerca de 41 años, continúa rondando el comercio de Manizales.
Aunque la Superintendencia de Sociedades decretó su liquidación en el 2011, el empresario salamineño Javier Valencia aún sigue firme al frente de las ventas, atendiendo desde el almacén Valher número 1, perteneciente a su hija Ana María Valencia, y detrás del cual persiste el Exclusivo, pues se confeccionan y se venden prendas con este nombre.
Sin embargo, este comerciante no se rinde, e incluso asegura que de aprobarse una nueva línea especial de Bancóldex para revivir empresas, le volvería a apostar a su almacén.
En diálogo con LA PATRIA, el actual director comercial del Valher 1, Javier Valencia, explica su trabajo y sus metas, luego del cierre de una empresa que se caracterizó por la atención especial y los horarios extendidos, motivo por el cual incluso fue destacado en su momento por la Cámara de Comercio como empresario destacado.
- ¿Qué ha pasado después de dos años de la liquidación de su almacén?
Fue una situación muy dura, fue complejo dejar un negocio que por diferentes situaciones tuvo que cerrarse. Sin embargo, siempre he sido una persona positiva, por lo que al terminar el ciclo de mi negocio, seguí apoyando a mi hija Ana María, diseñadora de modas, quien tomó las riendas desde hace unos seis años del almacén Valher número 1, el único en la ciudad, luego de una negociación con Hernán Pineda, propietario de estos almacenes en el Eje Cafetero.
- ¿Cómo se ha sentido en este negocio, pues aunque es familiar, finalmente no es suyo?
Esto me ha permitido mantenerme muy bien, porque no he dejado ningún día de estar en la actividad comercial, eso además me ayudó a tener tranquilidad, al poder ofrecer el mismo servicio y cariño que entregué en el Exclusivo.
- ¿Cuál fue el mayor problema del Exclusivo, mucho endeudamiento?
El endeudamiento, y que tenía una nómina muy grande, pues alcanzamos a tener unas 60 personas y ocho almacenes. Eso además, de los altos costos, las altas tasas de interés, y que lamentablemente en ese momento no había muchas opciones para respaldar a los empresarios, incluso alcancé a solicitar una amnistía de intereses para mantener el empleo.
Nuevo oxígeno
- Usted fue muy crítico frente a la falta de apoyo empresarial, ¿faltó respaldo?
Como empresario comercial llevo 43 años, y en las épocas difíciles del café, de los bancos y cuando los intereses se pusieron al 50% y al 60% usted iba a buscar un crédito de salvamento para aguantar ese tsunami, pero no lo encontraba, faltó quién nos ayudara. Ahora este tipo de medidas han logrado articular el sector oficial con el sector privado.
¿Han cambiado las cosas desde que cerró entonces?
Creo que sí. Una gran ventaja, es que ha cambiado mucho la visión tanto nacional como municipal y los gobiernos han buscado maneras de solventar esa situación, debido a que muchos negocios han tenido que cerrar sus puertas, a pesar de su tradición en la ciudad. En este tiempo han aparecido figuras como la alianza que hizo Bancóldex con la Alcaldía para otorgar créditos a los comerciantes de todas las actividades, llenando unos requisitos mínimos.
- ¿El Valher, por ejemplo, se ha beneficiado de la nueva ayuda?
Por supuesto, esto permitió que el año pasado, que estábamos en dificultades, pudiéramos surtir para la temporada de fin de año. Tuvimos un respaldo con la ayuda del Comité de Comercio de Manizales, donde tienen asiento todos los gremios de la ciudad, pues ha sido muy propositivo. En el caso de mi hija, le dio la posibilidad de oxigenar su negocio, pagar proveedores y seguir la actividad con un mejor flujo de caja.
Revivir el Exclusivo
- Bancóldex estudia nuevos proyectos en favor de los empresarios, ¿qué opciones hay?
Una propuesta que se le hizo en Manizales, a través de la Cámara de Comercio, fue la opción de una línea de crédito para revivir algunas empresas que desaparecieron por problemas económicos. Al presidente de esta entidad le sonó, y confiamos que apoye estos mecanismos.
- ¿Si lo reviven volvería el Exclusivo o el Valher se podría convertir en el Exclusivo?
No, porque el Valher es una marca muy posicionada y además es una empresa de mi hija, pero si aprueban ese mecanismo yo reviviría el Exclusivo, porque fue una petición que se clamó por más de 30 años.
- ¿Se puede decir entonces que hay un proyecto firme para revivir el Exclusivo?
Por supuesto, perfectamente, lo hemos pensando y está tan clara la cosa que tuve la oportunidad de hablar del tema con el propio presidente de Bancóldex, Luis Fernando Castro Vergara.
- ¿Cómo quedaron sus finanzas después del cierre de su empresa?
Pues diría que con menos dinero, sin plata, pero mucho más tranquilo, muy positivo y muy feliz de poder compartir el negocio con la familia y los clientes.
- ¿Y hoy sí está el palo para hacer cucharas y volver a emprender un proyecto de estos?
La actividad comercial ha sido mi vida, y por eso lo haría con todo gusto y el amor del caso, porque además conozco la clientela y mantengo el interés de seguir activo.
Algo de historia
El tradicional almacén de ropa de la calle 21, reconocido por su atención y calidad en el Eje Cafetero, cerró sus puertas
en 2011, dejando atrás 41 años de historia regional, luego de cinco años en proceso de reestructuración económica y de arrastrar un lastre financiero.
La empresa fue merecedora de varios reconocimientos por su empuje y ejemplo regional, pero entró en proceso de reestructuración el 19 de mayo del 2006 ante su difícil situación económica, hecho que la condujo a cerrar siete de los ocho almacenes que tenía y que generaban unos 50 empleos.
Pese a ello la empresa mantuvo su operación con su tradicional almacén de la calle 21, en medio de los embates
económicos que se registraron en los últimos años, y la nueva competencia comercial.
El tiempo previsto de reestructuración fue de 12 años, pero ante la difícil situación que se registró, el 3 de marzo del 2011 se tomó la decisión de cerrar.
La historia de este almacén se remonta desde el 25 de octubre de 1970, cuando Valencia abrió las puertas de su almacén
en el centro de Manizales. Desde esa época se destacó su liderazgo y trabajo ininterrumpido para atender en jornadas continuas y ofrecer horarios extendidos, desde las 8:00 de la mañana hasta las 8:00 de la noche y en temporada alta incluso hasta las 9:00 p.m. ó 10:00 p.m.

En compañía de su hija, Ana María Valencia, y su esposa, Martha Duque, Javier sigue ofreciendo servicios adicionales como los horarios extendidos y jornadas continuas.
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