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Hace cinco años se iniciaron en Colombia las primeras pruebas de lo que la Federación Nacional de Cafeteros denominó como los primeros pasos de cosecha asistida.
El propósito de estos ensayos apuntó a que los cafeteros comenzaran a recoger café con ayudas mecánicas o elementos de asistencia que mejoren la productividad de la mano de obra.
Entre las alternativas se incluyeron equipos como la derribadora que trajeron de Brasil, pero con algunas adaptaciones a las características de la caficultura nacional, unido al prototipo llamado Alfa, diseñado por Cenicafé.
Junto con estos dos métodos, se planteó la necesidad de poner lonas en el piso del cafetal, con el fin de que el grano caiga a las lonas para reducir tiempos de recolección.
Para cafeteros como Carlos Monsalve Muñoz, representante de la finca San José, de la vereda La Floresta, en Chinchiná (Caldas), y recién destacado por el Comité de Cafeteros de Caldas como ejemplo empresarial, estas son propuestas interesantes, pero implicarán varios años de trabajo para habituar a los cafeteros y recolectores del país.
Labor asistida
El gerente Técnico de la Federación de Cafeteros, Hernando Duque, piensa igual, pero destacó que ya es un proceso que está más cerca. La meta es que en mayo se tengan los primeros prototipos y la expectativa es que en octubre o noviembre se puedan liberar los primeros equipos para el uso de los caficultores, según su necesidad de cosecha.
De acuerdo con Cenicafé, la ventaja es que estas opciones permitirán ganar tiempo, utilizando el mismo proceso de recolección manual selectiva.
Para Duque la importancia es tener en cuenta que más que una moda, el objetivo es solucionar los problemas de escasez de mano de obra que vive Colombia, y además lograr mayores eficiencias en la recolección, con propuestas que incluyen un trabajo en equipo, y realizando retenciones de pases de cosecha para incrementar la oferta de frutos maduros en la planta.
Además implica cambiar la mentalidad del caficultor, con alternativas diferentes a las tradicionales como son el canasto o al coco plástico con el que tradicionalmente se ha recogido el café en el país.
Los avances

Hernando Duque, gerente técnico de la Federacafé
- ¿Qué avances se han logrado con los equipos para la recolección asistida?
Hace poco estuvimos en Brasil con la empresa Brudden, la firma que desarrolló la primera derribadora de café. Desde octubre del 2016 trabajamos en conjunto para desarrollar un dispositivo de recolección en la cosecha del café. En Colombia es muy diferente la recolección a la de Brasil, porque allí la cosecha no es selectiva y en Colombia sí. Por esta razón hicimos los ajustes para que el equipo haga la recolección de la mejor forma posible, haciendo la selección de granos maduros y sobremaduros, sin tumbar los verdes o reduciendo este porcentaje en la masa cosechadad.
- ¿Qué cambios se han logrado para adecuarla a las condiciones nacionales?
Se han hecho varios ajustes. La mano del equipo es más pequeña y con menos dedos, tendrá entre dos y tres. Por eso el equipo ya no guarda ninguna relación con el tradicional de Brasil. Los mecanismos internos también son más sofisticados. Están en período de patente, pero en las pruebas nos han demostrado que hay un desarrollo importante.
- ¿Cuándo se empiezan a aplicar en campo?
El próximo mes, en la segunda quincena de mayo vendrá el nuevo prototipo para evaluarlo en el Tambo (Cauca), región que está en cosecha principal. La meta es continuar haciendo pruebas semicomerciales, porque ya pasamos de la fase experimental. Hasta ahora los resultados son positivos y esperanzadores para tener una alternativa importante en la caficultura nacional, especialmente en el proceso de recolección donde tenemos que ser más competitivos.
- ¿Se puede determinar el porcentaje de eficiencia de este equipo frente a la recolección tradicional?
No, por eso haremos pruebas con el equipo definitivo que tengamos, con lotes comerciales, con trabajadores, con lonas y demás, para medir tiempos, rendimientos, definir los kilos que se recogen por hora y por trabajador, y el porcentaje de granos maduros que se recolectan, entre otras variables.
- ¿Cómo va el equipo Alfa, desarrollado por Cenicafé?
También avanza, construimos dos prototipos y estamos en vía de otros tres. Como hasta ahora está en fase de prueba, son prototipos que se hacen de manera individual, no hay un proceso industrial. Le incorporamos una tecnología para que trabaje en cafetales mojados, pues es un equipo eléctrico y por eso debe tener una protección reglamentaria.
- ¿Siguen insistiendo en que además de derribar el café es necesario poner lonas en el piso?
Exactamente. De acuerdo con Cenicafé, la ventaja es que esta opción permite ganar tiempo, utilizando el mismo proceso de recolección manual selectiva. La diferencia, es que el café que se desprende de las ramas cae a la lona y no al coco, como tradicionalmente se hace, con el fin de reducir tiempos. En las pruebas que hicimos, encontramos que un recolector puede cosechar el doble y hasta más por jornal.
- ¿Qué eficiencia se logra con las lonas?
Se pasa de recoger entre 12 y 15 kilos por hora hasta 34 kilos por hora.
- ¿Qué va a pasar con las zonas donde hay tantas faldas para usar las lonas?
Como los zurcos en café no están a favor de la pendiente, la lona irá atravesada, y por lo tanto los frutos no se ruedan. Además hay otra condición, trabajar en parejas para juntar y empacar el café. Por esta razón, eso requiere un cambio de mentalidad en el recolector, porque ya no puede trabajar con su coco y buscar un jornal individual.
Los equipos
1. La derribadora
El equipo genera vibro impactos que tumban el café. En Colombia le han hecho algunas variaciones para adoptarlo a las condiciones del país, con el apoyo de la empresa Brudden, con sede en Pompeia (Brasil). Hoy se tiene una máquina con un motor más pequeño, más liviana, brazos más cortos y con una mano con menos dedos y más cortos.
2. Alfa
Este equipo parece un rodillo, se mueve circularmente por encima de las ramas de café, con unas características que permiten tumbar el grano. Para ello también se requiere una lona en el piso.
3. Las lonas
Estas tienen un sistema de velcro (adhesivo) para juntarlas alrededor del árbol, con longitudes entre los 12 metros y los 25 metros, dependiendo de los zurcos del café.
Brasil no llegará a 60 millones de sacos
Aunque recientemente se estimó que Brasil tendrá una sobreproducción que oscila entre los 58 millones y 60 millones de sacos, justo en esta cosecha bianual alta, por lo visto dicha expectativa no se logrará.
La estimación la hizo el gerente técnico de la Federación Nacional de Cafeteros, quien recientemente visitó está nación.
"Según su propio consenso, estiman que la cosecha será muy similar a la del año pasado, equivalente a unos 54 millones a 55 millones de sacos", destacó.
La razón se debe a que aunque hay zonas donde se ve una mejoría, en otras áreas siguen teniendo bajos resultados, debido al período seco que tuvieron el año pasado, entre septiembre y octubre, afectando la producción para este año.
En el caso de Colombia, el gerente técnico recordó que aunque las zonas del Eje Cafetero no son de grandes volúmenes, todo apunta a que el sur sí habrá buenos resultados.
El pronóstico nacional es que para el primer semestre del año se tendrá una cosecha de 6 millones 100 mil sacos, un 3% inferior con respecto al 2017.
Duque también destacó que el mejoramiento del clima también influyó para que haya mejores floraciones en el centro y sur del país, Valle del Cauca, Quindío y santanderes entre otros, destacó.
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