Barriles ponen en entredicho $5 mil millones de seguros de la ILC

JUAN CARLOS LAYTON

LA PATRIA | MANIZALES

En entredicho se encuentran alrededor de $5 mil millones de los seguros que espera reclamar la Industria Licorera de Caldas (ILC), como compensación por el incendio que se produjo en las bodegas 3 y 4 el primero de octubre del 2011.

Aunque a la fecha ya se han entregado, como anticipos, cerca de $8 mil 500 millones y la meta es que haya recursos adicionales antes de que concluya este año, al parecer hay una partida que está en debate, pues según las aseguradoras hay unos activos que contablemente están mal ubicados.

La polémica se suscitó después de que se adelantó la revisión de los daños causados o emergentes por la incineración de los cerca de 21 mil barriles en las bodegas 3 y 4, y de los casi 6 millones de litros de alcohol que se consumieron en el incendio, entre otros, y que se estimaron inicialmente entre unos $20 mil y $25 mil millones.

La posición de la unión temporal Premacol (La Previsora, Mapfre y Colpatria), entidad con la que se aseguró la destilería, es que los barriles quemados no pueden estar en el grupo de inventario de mercancías, como ha planteado la empresa, sino en el de activos fijos, en el rubro de muebles y enseres, con lo que se reduciría su valor en los $5 mil millones mencionados antes. Sin embargo, para la ILC, esa es una posición ilógica, pues los barriles hacen parte activa en la creación del ron.

El hecho ha ocasionado que aún no haya acuerdo, e incluso ya se contemple llevar el caso a los estrados judiciales.

Darío Gómez, vicepresidente regional del Eje Cafetero de Delima Marsh, y a su vez representante de la unión temporal de corredores de seguros que representa a la empresa, junto con las aseguradoras Willis Colombia, Arangos Ltda. y López Gómez, confía en que haya un acuerdo pronto, pese a lo cual su posición es que dichos barriles deben contabilizarse en el grupo de mercancías, pues es material principal para hacer los licores.

Un sofisma de distracción

Un concepto similar planteó el presidente del sindicato Sintrabecólicas, Víctor Bustacara, quien asegura que Premacol está errado, considerando que los barriles son parte fundamental para el añejamiento de los rones. "Los barriles no solo hacen las veces del almacenamiento, sino que le entregan unos elementos adicionales que tiene la madera, como son los taninos para añejarlo, por lo que contribuyen en el proceso, hechos que ratifican que son una materia prima".

Asegura que estos no solo contribuyen al aroma y el sabor, sino al color propio del ron y a las diferentes calidades que se ofrecen. "Si el roble no le diera el bouquet al ron, no necesitaríamos almacenarlo en esos barriles, sino en un tanque de acero inoxidable como se hace con el aguardiente", explicó.

En su concepto, la insistencia de Premacol se convierte en una especie de sofisma de distracción o más bien de reducción, para pagar menos, por lo que el objetivo es que la ILC haga respetar sus derechos, dijo.

Una cosa diferente piensa Premacol, que insiste en su posición. Octavio Jaramillo, representante de La Previsora, se abstuvo de emitir algún comentario, pero indicó que se espera que la situación se resuelva pronto, aunque dijo que la ILC está en todo su derecho de llevar el caso a un juez.

Lucro cesante

También está pendiente por definir el valor real de las pérdidas por lucro cesante, o utilidad económica que se hubiera obtenido, si no se hubiera producido el incendio.

Este inicialmente se había estimado entre unos $10 mil y $15 mil millones, pese a lo cual también se espera que los ajustadores entreguen los estudios finales, para determinar ese valor total.

Por lo pronto, se espera que antes de que termine este año o comienzos del 2013 las aseguradoras hagan otro anticipo de unos $3 mil 300 millones más, por los daños causados o daños emergentes.

En cifras

* 5 millones 925 mil 660, el número de litros que se consumieron por el incendio.

* 21 mil 253, el número de barriles incinerados, de los cuales 3 mil 200 se encontraban en la bodega 3 y 18 mil 53 en la bodega 4. En madera tipo roble blanco colombiano representaban 1.570 toneladas.

* 120 tinas de 10 mil litros cada una también se quemaron y un tanque en acero inoxidable que almacenaba 50 mil litros.

El incendio

El incendio de la ILC se produjo el sábado primero de octubre de 2011 hacia las 8:00 a.m, y se prolongó hasta la madrugada del domingo.

Este siniestro se constituye como una de las etapas más difíciles de la destilería en sus 69 años de historia, constituida oficialmente como entidad autónoma en 1943.

De acuerdo con el reporte de la Licorera de Caldas, solo en 1982 se produjo un fenómeno similar, aunque de menores proporciones. Se incendió un tanque de alcohol, con unos 500 mil litros.

Se estima que el alcohol tafia que se perdió tenía, en su mayoría, un añejamiento de 1 a 4 años, a excepción de algunas tinas grandes que sí tenían un licor de mayor tiempo.