JUAN CARLOS LAYTON
LA PATRIA | MANIZALES
Hacia las 9:00 a.m eran pocos los cafeteros que habían llegado al sector, y los únicos que los aguardaban eran miembros de la Policía, que aseguraban que hasta ese momento todo estaba en plena calma... Más de lo que esperaban.
Sin embargo, hacia las 10:00 a.m el conocido sector de El Palo, entre la vía a Medellín y la entrada al municipio de Supía, se comenzó a llenar de yips, chivas y busetas con cafeteros dispuestos a volver a marchar por lo que califican la peor situación del sector, por lo menos, en 36 años.
Mientras el gobernador del resguardo indígena de San Lorenzo, José Nicanor Largo, invitaba a los productores a integrarse y a organizar las pancartas, de otros carros salían cafeteros que comenzaban a bajar la remesa para lo que auguraba sería una buena "sancochada".
En su inventario se incluían 10 racimos de plátanos, 20 kilos de yuca, 2 bultos de papa, un bulto de naranja, la carne completa de dos cerdos, siete galones de limonada y tres de agua, una pipa de gas de 40 libras y el llamado indio o la gran olla en la que, a juzgar por su tamaño, prometía un buen almuerzo para todos los que se acercaran.
Luego de una larga espera, y de la repetición continua a través de los megáfonos de "exigimos, exigimos, exigimos", hacia las 11:40 a.m se arrimaban otros protestantes, pero muchos menos de los que todos esperaban. Algunos reconocían que no era ni la sombra del movimiento que se registró el 13 de agosto, que no solo llenó la Plaza de Bolívar de Manizales, sino los alrededores, al punto de que algunos hoy todavía hablan de unas 12 mil personas.
Esto no los desmotivó. Hacia las 12:00 del mediodía retomaron los ánimos y después de una buena limonada y de parar los camiones para entregarles volantes y pedir apoyo para los cafeteros, se comenzó a organizar la marcha hacia el peaje de La Felisa.
Mientras tanto, Óscar Gutiérrez Reyes, coordinador nacional del Movimiento por la Defensa y la Dignidad Cafetera, resaltaba que el propio gerente de la Federación de Cafeteros, Luis Genaro Muñoz, había reconocido por una emisora nacional la regular situación del sector y la necesidad de un mecanismo de ayuda, ante los malos precios que se han vivido este año.
Justo ayer, el precio cayó por debajo de los $600 mil por carga de 125 kilos, y en regiones como Manizales, Chinchiná y Pereira se ubicó en $594 mil 500, cifra que según los productores evidencia que se está trabajando a pérdida, pues hoy los costos de producir una carga rodean los $700 mil.
Precisamente esta fue ayer la principal exigencia: un precio digno. A quien se le preguntara, reiteraba que no tenían cómo mantener los cafetales, por lo que en medio de las arengas, cuando alguien entregaba alguna declaración a los medios de comunicación, los otros marchantes que se dirigían en ese momento hacia el peaje de La Felisa resaltaban que para tener una leve recuperación necesitaban por lo menos un precio de sustento entre los $800 mil o $900 mil por carga.
"El bello reconocimiento de un Paisaje Cultural Cafetero terminará siendo puro cuento, o una simple distinción, pero sin café y cultivadores", aseguraba el exalcalde de Risaralda (Caldas), Jorge Danilo Gutiérrez, del Partido de la U.
Medidas injustas
Para el gobernador del resguardo indígena de San Lorenzo, el principal objetivo tiene que apuntar a mejorar la calidad del cultivador, con un precio justo y digno, "pues lo poco que se produce no compensa lo que nos están pagando".
Resalta que además de la plaga más grande que tienen, y que en su concepto es el bajo precio, existen otras epidemias como la roya, la broca y la conocida araña roja. "No tenemos un apoyo decidido del Gobierno, y aunque hoy producimos un café especial, La Vereda, esto no significa que se haya mejorado la calidad de las comunidades, solo alcanza para el sustento".
"Aquí lo que se viene es una crisis peor, y hasta el mismo gremio vive en otro país porque dicen que estamos muy bien, cuando los más pequeños viven un gran problema", resaltaba Rubén Darío Jaramillo, cafetero y dirigente de Risaralda.
La queja de María Neise Jaramillo Izquierdo, de la vereda La Divisa (Supía), es que las cuotas de los créditos sí llegan muy puntuales, por lo que además de deudas, las plagas, los altos costos de los insumos y los bajos precios se convirtieron en una mezcla peligrosa.
Durante el recorrido, y con la resignación del bajo número de cafeteros, al final algunos aplaudieron que llegaron más manifestantes de Quinchía y de su corregimiento de Irra, y con cerca de 500 marchantes en total continuaron el recorrido hacia el peaje de La Felisa.
Entre tanto, en Varsovia (Filadelfia), solo rodeaban los 80, y a lo largo del recorrido los productores solo tuvieron el acompañamiento de sus propios cafetales que los vieron pedir lo mismo que sus colegas. Un precio justo.
Entre sumas y restas, Óscar Gutiérrez Reyes resaltaba que en Risaralda les daban cuenta de unos 700 marchantes, en Calarcá (Quindío), de unos 400; en Chaparral y en el Líbano (Tolima), de 700, con lo que las cuentas le daban en todo el país unos 20 mil. "No llegamos a la meta que soñé de 50 mil, pero seguiremos reclamando", aseguraba.
Hacia las 3:00 p.m los cafeteros volvieron a El Palo, y después de descansar a orilla de carretera y de un justo almuerzo, hicieron un breve balance del encuentro. "Ahora la respuesta la tiene el Gobierno, o de lo contrario seguiremos".
Julián García | corresponsal | LA PATRIA
Los pocos marchantes en el sector de Filadelfia tuvieron como principales testigos de sus reclamos a sus propios cafetales.
Los cafeteros del norte de Caldas también se unieron a la protesta. Aunque en este caso solo participaron unos 80 productores, se ubicaron en el sector de Varsovia, en la carretera al norte, en límites entre Filadelfia y Aranzazu, para pedirle al Gobierno que les aumente el precio del grano.
A medida que transcurría la jornada subía la temperatura y se calentaban los ánimos de los asistentes, quienes desde un megáfono gritaban arengas y les pedían a los transeúntes la
solidaridad con el gremio. “Queremos que suban los precios y bajen los costos de los insumos”.
Álvaro Zuluaga, productor de Aranzazu, aseguraba que lo único que escondía bajo el sombrero era un montón de deudas. "Los cafetales no están produciendo ni para pagar los intereses”.
700 cafeteros se unieron en Risaralda*
Alrededor de 700 cafeteros se movilizaron en Risaralda para solicitar una vez más el cumplimiento del pliego de peticiones, que incluye un precio rentable y remunerativo, alivios crediticios, atención para la roya y broca, y reducción de precios de abonos e insecticidas, entre otros.
Representantes de los municipios de Belén de Umbría, Santuario, Apía, La Celia, Balboa, Santa Rosa de Cabal y San José (Caldas) se dieron cita en la plaza principal del municipio para reiterar su malestar por lo que calificaron como indiferencia del Gobierno.
Según Duberney Galvis, coordinador para Risaralda de la Movilización Cafetera, "hoy lo que se evidencia es una total indolencia e indiferencia a la crisis cafetera". Los representantes calcularon que estabilizar la producción cuesta alrededor de un $1 billón. Aseguraron que si el Gobierno no entrega respuestas satisfactorias, se unirán para ir hacia Bogotá "así sea caminando o en bus".
* Con información de La Tarde.
Claudia Largo, cafetera de Riosucio
Porque no aguantamos los bajos precios del café, mientras que sigue subiendo el valor de los fertilizantes y los insumos y además hay muchas plagas.
Maria Rubiela Ladino
Porque además de los bajos pecios, ya no tenemos ni con qué pagar, por eso lo único que pedimos es más colaboración.
Walter Clavijo
Porque estamos trabajando a pérdida, tenemos broca, roya y araña roja. Así es muy complicado defender las parcelas.
Alirio de Jesús Cabrera Bedoya
Tengo unos 10 mil palos de café, pero no somos capaces de sobrevivir con ese precio tan bajo, nuestro café es Nespresso triple AAA, pero igual nos afecta.
Leonel Andica
Porque el bajo precio y el alto costo de los insumos se convirtió en un dolor de cabeza para nosotros, hay que tener un precio por lo menos de $900 mil por carga.
Luis Albeiro Gañán
Porque estamos en una crisis muy grande y las variedades de café no son tan buenas como viene diciendo la Federación de Cafeteros. Necesitamos que nos aumenten el precio.
María Neise Jaramillo
Tengo seis mil árboles de café, pero con la actual condición, con un precio tan inestable, tantas plagas y los créditos que sí llegan muy puntuales, estamos muy afectados.
José Luciliano Andica
Lo que pedimos es apoyo, para trabajar mejor, porque ante la actual situación aguantamos hasta hambre.
María Eucaris Rodríguez
Muchos cafeteros ya ni quieren ir a recolectar el café, por los precios tan bajos. Los químicos muy caros, de verdad necesitamos ayuda.
Fotos | Darío Augusto Cardona | LA PATRIA |El sancocho que se preparaba en El Palo se convirtió en la principal recompensa de los marchantes.
El sector cafetero recibió una ayuda del Gobierno nacional por un monto total de $80 mil millones, equivalente a $60 mil por carga de 125 kilos, para cuando el precio caiga por debajo de los $650 mil. La ayuda es temporal, hasta el 31 de enero. La expectativa es que se tomen nuevas decisiones para después de esa fecha, pues el precio sigue cayendo. También se eligió una
comisión de alto nivel para comenzar a estudiar la situación de la caficultura nacional.
El uso de este sitio web implica la aceptación de los Términos y Condiciones y Políticas de privacidad de LA PATRIA S.A.
Todos los Derechos Reservados D.R.A. Prohibida su reproducción total o parcial, así como su traducción a cualquier idioma sin la autorización escrita de su titular. Reproduction in whole or in part, or translation without written permission is prohibited. All rights reserved 2015