Otro reto para los Mauricios en el Rally de Perú

Ricardo Patiño

LA PATRIA | MANIZALES

A los manizaleños Mauricio Salazar Velásquez, el piloto, y Mauricio Salazar Sierra, el copiloto, los mueve el corazón de la Fundación Alejandra Vélez Mejía, organización dedicada a apoyar familias de niños con diferentes tipos de cáncer.

Los dos conforman el equipo MS2 Racing y desde hoy hasta el próximo domingo tiene un nuevo reto en el Rally Baja Inka de Perú, donde el año pasado consiguieron el tercer puesto. La competencia es considerada el rally todoterreno con mayor grado de dificultad en Sudamérica.

"Es una aventura llena de retos que nos permitirá seguir conociendo el desierto suramericano. El año pasado participamos convirtiéndonos en el primer equipo colombiano que logra un podio. Este año la meta es repetir lo mismo", comentó Salazar Velásquez.

Los Mauricios compiten por una labor social y el primer paso ya lo dieron. La Fundación adquirió la sede con recursos de patrocinadores de los deportistas. Sigue reestructurarla y dotarla, según Gloria Cecilia Betancurt, directora de la entidad.

Esta carrera, por el desierto peruano, les servirá de preparación a los caldenses que buscan volver al Rally Dakar en el 2018. En el 2016 hicieron historia al ser la primera tripulación colombiana en terminar la competencia automovilística más exigente del mundo.

Los manizaleños

- Mauricio Salazar Velásquez: Viene de la actividad del rally de Colombia, que a finales de los 90 se dejó de correr por problemas de seguridad. Retomó la práctica del 4x4 y en los rallies de regularidad en el 2010. Pensó en el Dakar en el 2013 cuando fue a ver la rampa de largada en Lima. Allí conoció a la gente de Sodicars y corrió en el 2014 como navegante de Philippe Kreisberger.

- Mauricio Salazar Sierra: Fue campeón de navegantes de Colombia en 1992. Padeció un cáncer entre 2005 y 2010, y el año pasado volvió a la competencia, pero con una intención social por la Fundación Alejandra Vélez Mejía. Corrió el Desafío del Desierto.

Destacado

"Todos los niños que padecen cáncer corren un rally cada día, su fortaleza es la que nos motiva", pilotos del equipo MS2 Racing.