Dos aficionados de la bicicleta se irán de aventura por Sudamérica hasta llegar a Ushuaia, en Argentina

David Muñoz

LA PATRIA | MANIZALES

La felicidad no cabe en sus rostros cuando les preguntan por qué recorrerán Sudamérica en bicicleta. Con una gran sonrisa, Kerman Ospina Céspedes y Juliana López Gutiérrez responden que es un sueño que se van a cumplir para salirse de lo tradicional que les indica la sociedad.

Ellos, pareja desde hace 10 años y con 5 de convivencia, están decididos a salir el domingo de Villamaría, donde nacieron, y llegar a Ushuaia (extremo austral del continente conocido como el fin del mundo), en Argentina. En el recorrido quieren conocer, disfrutar y tomarse fotos para el recuerdo. Planean regresar al país en una aventura que tienen pensada cumplir en dos años y medio.

"Es una aventura que venimos investigando desde hace dos años. Es para cumplir un reto personal y también un sueño que tenemos, que es viajar por el continente en bicicleta, que es lo que más nos gusta. Queremos combinar la bici con el viaje", explica Kerman, de 29 años.

Los dos se inspiraron en Sebastián Rosero y Paula Andrea López, conocidos como Kumanbike,

quienes ya han hecho la ruta. "Estamos animados y motivados. Es un reto personal, pero también queremos ir a experimentar y a conocer culturas", agrega Juliana, de 30 años.

Para cumplir el sueño, renunciaron a sus trabajos. Él es mecánico dental y ella secretaria. Sus jefes les dijeron que están locos, pero ellos, seguros de su propósito, utilizaron la liquidación para terminar de ajustar las bicis y para juntar el dinero con otro que tienen ahorrado y tener insumos para salir.

"Costearse el viaje en avión y pagar un hotel es más costoso, por eso llevamos nuestra casa, que es una carpa; elementos personales, un colchón para dormir, cocina, estufa, que se llama camping gas; ollas y la ropa para los domingos. Empacamos todo lo básico", comenta la mujer.

"A parte de ser una hazaña, es una aventura que nos marcará a los dos, es una historia de amor. Cuando volvamos que nos regalen una bienvenida brutal, porque vendremos con deseos de escribir un libro, de mostrarles fotos y traerle Sudamérica a los que no tienen la oportunidad de conocer", sostiene Ospina.

Los dos aseguran que no tienen afán, que al no tener jefes, se levantarán a la hora que quieran, pedalearán hasta las 3:00 p.m. y luego se sentarán a escribir las memorias de ese día.

Lo califican

"Hay que romper las barreras que nos mantienen como unos robots. Hay que cumplir los sueños de cada quien porque la vida es un minuto y si no la disfrutamos, estamos viviendo por los demás. Hay que obsesionarse por los sueños hasta que se hagan realidad": Kerman Ospina.

"Estamos persiguiendo un sueño, es lo que queremos hacer y por lo que vamos a luchar. Vamos a mostrarle a la gente que hay que sacrificar muchas cosas, pero que valen siempre la pena": Juliana López.

Preparación

El viaje lo harán en bicicletas todoterreno normales. En ellas viajaron por el país y en cada recorrido descubrieron lo que les faltaba para emprender este sueño. El último viaje lo hicieron al Desierto de la Tatacoa, en Neiva, y ahí sintieron que estaban listos para irse por Sudamérica. Además, subieron varias veces a Letras y acamparon en el Cerro Gualí.

La familia

Kerman y Juliana dicen que la familia es complicada de manejar porque no es un viaje común, hay riesgos, es mucho tiempo y no tienen un sitio específico para dormir. "Es el diario vivir y para ellos es un susto que hagamos este recorrido".

Los recursos

Los aventureros viajarán con recursos propios, de los que tienen pensado gastarse máximo $10 mil diarios, e hicieron artesanías para vender en durante el recorrido. La empresa Ariadna Communications Group se vinculó para patrocinarlos. Les dan un aporte económico mensual, vestuario deportivo, tecnología para el registro del viaje y les crearán la página web www.fabricandosueños.com para que las personas les hagan donaciones.