Óscar Veiman Mejía
LA PATRIA | Manizales
La gloria, como les suele ocurrir a los arqueros en la definición con cobros desde los 12 pasos, le llegó en segundos a Juan Felipe Cardona. La final estaba 4 para Once Chinchiná, su equipo, y 4 para Semenor. Ningún jugador había fallado. El título para los chinchinenses estaba en las manos de su portero, y también en sus piernas.
La tarde de sol del sábado en la cancha del barrio Aranjuez, otro templo del balompié aficionado manizaleño, llegó cargada de goles, golazos, lágrimas y celebraciones. En juego estaban las finales de la A y de la B, las dos categorías de la Quinta edición del Chiquifútbol Alcaldía de Manizales.
Quedaba un cobro para cada equipo. Era el momento para Juan Felipe, de 11 años y 1,53 de estatura. Tenía la responsabilidad de resolver la final de la A, que en los 60 minutos reglamentarios terminó 3-3, en los que sobresalieron los tantos de tiro libre de Santigo Galvis, por el Once Chinchiná, y de Alejandro Gómez, por el Semenor.
El portero miró de frente a Emilio Rodríguez, delantero del Semenor. La pelota, a media altura, iba con rumbo de gol al lado derecho. De pronto sacó su guante azul y lo desvió. La mitad de la gloria estaba en el bolsillo. Él mismo, con sus guayos verdes fosforescentes, llevó el balón al punto blanco para el cobro definitivo.
La tribuna, con padres, madres, tíos, abuelos y amigos, cantaba al ritmo de las bandas musicales. La jornada tenía buenos presagios para Semenor, que una hora antes con el equipo de la categoría B venció 2- 1 a la Corporación Deportiva Chinchiná y se alzó con la copa.
Por la A
Ahora los de la A, también en representación de Chinchiná y del Semenor, dependían de lo que hiciera el fornido arquero, ya no con sus manos, sino con su pierna derecha. Juan Pablo tenía de rival a Juan Andrés Botero, el guardameta del colegio de la Arquidiócesis de Manizales.
En el Chiquifútbol regional 2019 participaron 84 equipos, en las dos categorías. En juego también estaba el cupo para el Internacional, que del 28 de junio al 2 de julio, reunirá en la capital caldense a representaciones de Norteamérica, Centroamérica, Perú y Ecuador.
El portero del Once Chinchiná nació en Santa Rosa (Risaralda). Ayer recordó: "Empecé a tapar en las calles de mi barrio La Milagrosa, mi primer equipo fue Termales, antes era defensa y jugaba microfútbol, pero me enamoré de la portería. Quiero ser como Manuel Neuer (Alemania) o como David Ospina (Colombia)".
Juan Pablo Cardona le pegó duro al balón, arriba y al ángulo derecho. Gooooooooool narró el locutor. En las gradas saltaron Andrés Felipe y Diana Liseth, padre y tía del arquero. En la cancha los del Once Chinchiná encerraron en abrazos al de uniforme zapote, su compañero y héroe. La jornada la redondeó cuando lo premiaron como la valla menos vencida. "Es mi primer gran título para seguir con el sueño de ser futbolista profesional, y también odontólogo".
Contentos
Matías Figueroa, del colegio Granadino
Es una competencia muy bonita, lo hicimos muy bien.
Tomás González, del Once Caldas
Lo mejor fue que nos divertimos mucho.
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