Ricardo Gómez Giraldo


Gracias a una estructura social basada en el hacendado del siglo XIX, en Colombia nos acostumbramos a decirle "don", a cualquier propietario de tierra. Con los años, el "don" evolucionó al "doctor". Hoy, todos quieren ser llamados "doctor" y a cualquiera le llaman así.
En el mundo, doctor realmente es quien se ha formado como investigador, un científico que domina un método, conoce y construye teorías y aporta a la sociedad nuevos conocimientos. También se le dice doctor al médico, por supuesto.
Hablando de los científicos, los doctores por formación o Philosophical Doctors (PhD), los hay muy "teóricos", pero que no por ello dejan de influir en nuestras vidas de manera profunda. Están los economistas, por ejemplo, quienes durante el siglo XX fueron los ideólogos de políticas públicas, unos jalonando el libre mercado, otros proponiendo un estado más intervencionista.
Están los investigadores de nuevas medicinas que hacen cosas tan sencillas e importantes como disminuir nuestros dolores físicos y alargar nuestras vidas o cosas tan complejas como la prevención de enfermedades a partir del estudio de células madre, como los recientes Nobel de Medicina, Gurdon y Yamanaka.
En Caldas están sucediendo cosas interesantes en cuanto a la formación y existencia de doctores-investigadores. Se ofrecen al menos ocho doctorados en áreas como las ciencias sociales, agrarias, el diseño, las ingenierías y las biomédicas.
Como se ofrecen doctorados, realizamos investigación. Igualmente, las universidades incorporamos decenas de profesores que han estado formándose como investigadores en cualquier parte del mundo.
La Universidad de Caldas, por ejemplo, invierte más de $10 mil millones al año en la formación de doctores y llegará en 2015 a 35% de sus profesores de planta con título de doctor. Hoy la institución tiene 70 y en pocos años tendrá 150 doctores.
Varios de los investigadores doctores ya titulados de nuestra universidad tienen impactos -unos aún potenciales- importantes para Colombia: el laboratorio de estratigrafía, liderado por Andrés Pardo, hace poco demostró científicamente ante delegados de toda la industria de hidrocarburos colombianos, que existen zonas del sur del país con alto potencial de hidrocarburos, antes descartadas.
Otros, como el entomólogo Alberto Soto, investigan insectos, como controladores biológicos que se comen otros insectos considerados plagas y este proceso beneficia a todo tipo de agricultores. Hay doctores como María Rocío Cifuentes, que ayudan a la resocialización de menores de edad que combatían en grupos violentos al margen de la ley y les cambian la vida.
Hay investigadores que transforman desechos en elementos útiles, como Sandra Montoya -ya casi doctora- en su planta de Bioprocesos. Hay otros que piensan y escriben sobre filosofía, sobre la condición humana. Esto puede impactar nuestra cultura de manera lenta, pero profunda.
Incluso a veces las ciencias básicas también terminan volviéndose aplicadas, con el paso del tiempo. En ese sentido, cabe recordar lo que alguna vez dijo la vicerrectora académica Amalia Ríos, primera doctora en química graduada en la U. del Valle: "todo estudio básico encontrará su aplicabilidad a medio o largo plazo, lo importante es investigar".
También hay doctores que producen menos conocimiento de lo esperado o que abandonan la realidad, sin lograr darle un valor social a su saber o sin poder aterrizarlo.
En todo caso, los doctores de verdad, aquellos que formalmente y de corazón son PhD, impactan nuestra sociedad de múltiples maneras. Una de ellas es directa, en la medida en que sus estudios resuelven nuestros problemas sencillos o complejos.
A la vez, ayudan a formar ciudadanos con saberes más profundos, con un espectro de conocimiento más amplio y que nos deben ayudar a comprender mejor todas las dimensiones de lo humano y de nuestro entorno.
Son esos doctores quizás nuestra mayor esperanza de desarrollo, a veces en el mediano y en el largo plazo, pero también aquí y ahora. Por eso, valen oro.
El uso de este sitio web implica la aceptación de los Términos y Condiciones y Políticas de privacidad de LA PATRIA S.A.
Todos los Derechos Reservados D.R.A. Prohibida su reproducción total o parcial, así como su traducción a cualquier idioma sin la autorización escrita de su titular. Reproduction in whole or in part, or translation without written permission is prohibited. All rights reserved 2015