Leonardo Pineda

Deseo dedicar este artículo a la memoria de mi adorada sobrina Ivonne Daniela, quien a sus 16 años prematuramente dejó este mundo privándonos de su enorme ternura y quien compartía conmigo el amor por el cine y la lectura, entre muchas otras cosas. Los que tuvimos la dicha de conocerla siempre la llevaremos en nuestro corazón.

Pasaron los Óscar sin muchas sorpresas en cuanto a los ganadores; todos mis vaticinios fueron acertados excepto por el premio a mejor actriz que se lo otorgaron a Jennifer Lawrence por su papel en Silver Linings Playbook; me imagino que los académicos sabrán por qué, pero a mi parecer fue más la promoción de sus publicistas que su misma interpretación lo que llevó a su triunfo. Reconozco con beneplácito la enorme sorpresa que fue la mejor dirección para Ang Lee por La vida de Pi, pues sin duda es meritorio lo logrado por este genio con la realización de una historia tan difícil y tan filosófica, acercándola a un espectáculo visual maravilloso. De resto todo pasó tal cual se esperaba, un homenaje más bien soso a los 50 años del 007, algunas remembranzas musicales y una presentación mucho más pulcra y decente que la prometida por los organizadores del evento. Le faltó a los Óscar mucho más brillo para celebrar su entrega número 85, realmente quedó faltando “algo” que hiciera la noche memorable. Bien por la intervención de Michelle Obama, fatal la justificación de la señorita Lawrence cuando la ovacionaron de pie y ella lo redujo todo a su caída, malísima la intervención del osito Ted y bellísima Charlize Theron.

Superada la etapa de premiaciones lo que se viene es una promoción fuerte de las nuevas películas, al menos en el marcado americano, porque a los cines locales apenas estarán llegando los títulos nominados y ganadores que no han terminado su recorrido por taquilla, de las que vale destacar The Master con los nominados Philip Seymour Hoffman, Amy Adams y Joaquin Phoenix, una verdadera película de “actores” con una trama interesante acerca del origen y la evolución de una importante secta de las últimas décadas. También está en cartelera la película El Vuelo que le valió nominación como mejor actor a Denzel Washington y Silver Linings que acá se llama Los Juegos del destino (¿?) que es muy divertida y superficial.

De una vez advierto que llega a nuestras carteleras lo que se asume será el reemplazo de la famosa serie de vampiros, me refiero a Hermosas Criaturas protagonizada por Alice Englert, Viola Davis y Emma Thompson, dirigida por Richard LaGravenese, la cual se va a convertir en la cinta preferida de muchos adolescentes como ha pasado en otros países. Viene también la más reciente película producida por Guillermo del Toro llamada Mama, protagonizada por Jessica Chastain, Nikolaj Coster-Waldau, Megan Charpentier e Isabelle Nelisse, dirigida por Andrés Muschietti, cinta que promete mucho y a la que le ha antecedido su fama en las redes sociales. Como se puede apreciar, querido lector, el cine de esta temporada es mucho más divertido ya que busca generar taquilla y se aleja un poco de la intelectualidad de los premios, es ese cine digerible y que se hace tan necesario luego de la temporada de premios, cine para disfrutar como el que siempre le gustó a Ivonne.

Todo pasó tal cual se esperaba, un homenaje más bien soso a los 50 años del 007, algunas remembranzas musicales y una presentación mucho más pulcra y decente que la prometida por los organizadores del evento.

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