Carlos E. Ruiz


Fernando Pessoa, el solitario e irreverente, escribió que la vida es una isla de náufragos, a la vez que se definía con "humildad" en la nómina de los "grandes hombres de inacción". Y a las palabras les dio el sentido de cuerpos tangibles, de sirenas dispuestas a ser observadas, de sensualidades involucradas en ellas. Pessoa es una fuente para el deleite caprichoso en pensamientos de un andar libre y suelto. La mejor forma de acaparar el tiempo es acudiendo en su auxilio, para la meditación larga, con los contrasentidos casuales que llevan a parte alguna. Sonambulismo. Delirios. Escarceos en las palabras en busca no tanto de sentido, sino de lugar, al igual que las personas merodean por los días para sentar cabales, a la manera de los peregrinos, con destino siempre incierto.
Las palabras se aposentan en los diálogos y en los monólogos. En los silencios. Son errabundas buscadoras de sueños, o de realidades escabrosas. O de sonora e insonora poesía. En las palabras el asidero es volátil, dependiendo de época, lugar y circunstancia. Los sentidos de ellas se amplían o restringen, acorde con las condiciones cambiantes que marcan los momentos.
La racionalidad es un esfuerzo inacabado, en busca de significado y coherencia, de argumentos para dilucidar problemas, en diálogo con uno mismo, o con otros. Pero no siempre se alcanza la fortuna, o el acierto, de conseguir resultados en la configuración de verdades, o de aproximaciones acertadas a la realidad. Todo resulta ser escurridizo. Pero la retórica hace el deber de elaborar frases y frases para el tornado en el aire de las sumisiones y los compromisos. Veleidades suelen acompañar las tentativas, amparadas en ocasiones por el fuego de pasiones desproporcionadas. El gusto o deleite ante la belleza de un crepúsculo, un árbol de rico follaje estremecido por el viento, una flor, el rostro cálido de una mujer pensativa, en duda. Niños que juegan con ingenuidad e inocencia por las calles y los parques. Ocasiones para el silencio sin palabras, ajenas al pensamiento y al intercambio.
Los políticos hacen de las palabras circunloquios para la fascinación de incautos. Y los gobernantes enarbolan campañas con remesas de contenido vacuo. Promesas pululan en los recintos del ágora y de las plazas. Complacencia interesada en los medios, o desapego hiriente al no alcanzar dádivas del poder. Los días en cambio van tejiendo las otras realidades, que se imponen sin sosiego y con el drama de lo contingente que aligera los pasos, con independencia de las manos ajenas.
El destino propio, como diría Crescencio Salcedo, es culebrero. El horizonte por la lejanía suele a veces verse despejado, pero inalcanzable. El reto es hacer el intento de llegar, con metas cercanas y sucesivas, hasta un final insospechado. Válido el esfuerzo, la voluntad de trabajo, lo laborioso de las puntadas. La atmósfera de proximidad, y hasta de intimidad, da el aire para sostener el ritmo. Pausas no faltan, motivo de duda, desconcierto, pesadumbre. Lograr sintonía en los ambientes de labor o tertulia, nada fácil, pero no imposible de alcanzar, con el respeto en las diferencias, la honestidad en la coherencia del pensar-decir-actuar, hacia el bien común. Y la dignidad en el talante no contaminable por influencias perniciosas, o por dardos de ocasión.
Respeto y solidaridad son dos cualidades que dan piso a un sistema de valores en una sociedad con ambición de superarse e ir adelante, hacia la equidad, la justicia, la libertad. La educación es el medio para formar los individuos, con métodos activos, y docentes imbuidos por el altruismo, de la más alta eficacia. Educación para la búsqueda incesante de conocimiento. Educación para la comprensión y la armonía. Educación para el disfrute de la belleza, donde quiera que se encuentre. Educación para el debate constructivo, de suma de esfuerzos, en campos de dirección conciliable. La ortodoxia no es lo apropiado. Mejor la heterodoxia. No ser cautivos unidireccionales de credos o ideologías. Apertura para la forja de conocimientos en contextos de realidad, sin abandonar utopías e ilusiones, como propulsoras en el camino de rumbo meándrico.
¿Qué experiencias va dejando la vida en las personas? ¿Cómo asimilar, en el compartir, las vivencias, por positivas o negativas que sean? La disposición de ánimo es lo fundamental. El espíritu de emprendimiento, para decidir cada paso con la ambición de aportar en la formación propia y de los entornos, con resultados progresivos, plasmables.
En Pessoa las palabras son "cuerpos tocables, sirenas visibles, sensualidades incorporadas". Por las palabras nos comunicamos. También por lo expresivo, aún lo inexpresivo, de los gestos. Por el aletear de manos. Por los silencios. Por las distancias. Por el pensamiento en cabildeo, o en elucubración de soledad. Por el cruce de miradas.
Michel de Montaigne (s. XVI) relata en uno de sus "Ensayos" el secuestro que padeció por bosques, en manos de malandrines enmascarados. Despojado de pertenencias y asediado por cuantía del rescate. En soledad e intimidación, Montaigne conservó la calma, favorable al diálogo. No interpuso favor de clemencia alguna. Al poco tiempo, el jefe de los bandidos se le acerca, con palabras delicadas, ordena devolverle todo y lo declara en libertad, decisión que tomó por la simple razón de su semblante sereno, la franqueza y firmeza de sus palabras. Otros tiempos eran. Montaigne comprendió que la condición de su rostro fue la mejor respuesta a los ultrajes y ofensas, al igual que su mirada tranquila y la sencillez de su voz.
No tengo lección alguna de impartir, apenas insinuaciones, elementos de motivar para el trajín en el sendero. Ni dispongo de palabras para salvar el mundo. "¿Ignorabas, acaso, que el hombre es un simple viajero?", preguntó Epicteto.
El uso de este sitio web implica la aceptación de los Términos y Condiciones y Políticas de privacidad de LA PATRIA S.A.
Todos los Derechos Reservados D.R.A. Prohibida su reproducción total o parcial, así como su traducción a cualquier idioma sin la autorización escrita de su titular. Reproduction in whole or in part, or translation without written permission is prohibited. All rights reserved 2015