María Leonor Velásquez Arango


Vivimos en comunidad, somos parte de una familia y de una sociedad y para ello necesitamos unas reglas mínimas que nos permitan estar en armonía y alcanzar nuestros propósitos; pero cada vez eso parece más difícil en un entorno donde hemos perdido el valor por lo fundamental, donde los actos de violencia, corrupción y desastres se han convertido en parte del paisaje natural en el que nos movemos.
Queremos avanzar hacia una sociedad mejor, queremos tener calidad de vida y mejores oportunidades, queremos transformar nuestra ciudad en una mejor oferta para los que vivimos en ella y para los que nos visitan y para ello vamos a necesitar rescatar valores esenciales para la convivencia y el fortalecimiento del tejido social.
Quiero invitarlo a reflexionar sobre cuatro valores que, desde el punto de vista del grupo de Estoy con Manizales, deberíamos fortalecer como parte de nuestra cultura ciudadana: respeto, solidaridad, confianza y apertura.
Hablar de respeto es hablar del otro, es tener la capacidad de identificar dónde llegan mis límites y comienzan los del otro, es ser capaz de reconocer, aceptar y valorar al otro como legítimo, con sus particularidades y diferencias ¿Qué nos pasa con la tolerancia y la pluralidad? ¿Dónde está nuestra capacidad para entender que puede haber formas de pensar diferentes a la nuestra que también son válidas? ¿De dónde nos viene la autoridad para pensar que nosotros estamos en lo cierto y el resto están equivocados? ¿Qué te pasa a ti con lo que es diferente, cómo lo miras, cómo lo aceptas, cómo lo incorporas en tu vida?
Para vivir en sociedad necesitamos no solo respetar las reglas y normas establecidas; el respeto empieza por aceptarme y reconocerme como un ser valioso. Cuando nos cuesta aceptar y valorar al otro, debíamos empezar por preguntarnos qué necesitamos aceptar y valorar en nosotros, en cambio de tratar de cambiar al otro o simplemente de negarlo o rechazarlo.
Si hablamos de solidaridad parecería que somos buenos para ayudar a otros en momentos de crisis, pero ¿qué pasa cuando la tragedia deja de ser noticia? El desarrollo de la sociedad va más allá de enfrentar los momentos difíciles. La cooperación y la capacidad de unir esfuerzos alrededor de un propósito común son elementos fundamentales del desarrollo; sin embargo, cuántas veces nos quedamos criticando y esperando que alguien haga algo para que las cosas mejoren ¿Por qué esperar a que la solución venga de afuera? Podríamos tomar la iniciativa y empezar a buscar aliados para nuestras causas, seguramente los encontraremos mucho más cerca de lo que nos imaginábamos.
Pensar que las cosas no están a nuestro alcance y dejarlas de lado es el camino más fácil, asumir el liderazgo y convocar a otros es el camino difícil pero una vez lo empezamos a recorrer aparecen muchos que quieren unirse y al igual que nosotros estaban esperando que alguien lo hiciera ¿Cuál es esa idea que no has podido desarrollar? ¿Cuál es ese tema que te preocupa y para el cual no has encontrado solución? ¿Cuál es esa causa que te gustaría promover?
Pasemos a la confianza, Francis Fukuyama en su libro ‘Confianza’ afirma que solo aquellas sociedades que presenten un alto grado de confianza social serán capaces de crear las organizaciones flexibles y de gran escala que se necesitan para competir en una economía global. Y no es necesario ir más allá del ámbito de nuestras relaciones personales, familiares, laborales, académicas y sociales, la confianza es un elemento esencial que permite generar lazos y construir redes y también es ese elemento que cuando se destruye es muy difícil de recuperar.
Confiar quiere decir creer en que el otro dice la verdad, en que el otro es capaz de hacer lo que me ofrece, que el otro no me va a defraudar, que el otro tiene el compromiso y la responsabilidad suficiente para cumplir con lo que prometió. Y al igual que el respeto este es un valor que empieza por nosotros mismos; necesitamos fortalecer la confianza en nosotros para poder confiar en el otro. Así que, si hay muchas cosas que hoy te generan desconfianza la primera pregunta que deberías hacerte es ¿cómo está la confianza en mí? Tal vez necesitas reconocer esos pequeños avances y triunfos que has tenido y ¿por qué no mirar también los de tu hermano, tus padres, tu profesor, tu jefe?
El mundo hoy se mueve a través de redes: redes de apoyo, de conocimiento, de negocios, redes sociales. La construcción de redes es básicamente un ejercicio de construcción de relaciones entre personas, entre instituciones, entre sociedades y la base de unas buenas relaciones es sin lugar a dudas la confianza.
A esta altura hemos hecho un recorrido rápido por el respeto, la solidaridad y la confianza; todavía nos hace falta un valor fundamental que es la base para construir nuevas soluciones e incorporar la innovación en una sociedad, me refiero a la apertura. No sé si usted estaría de acuerdo conmigo en que somos una sociedad que se cuida y mira con desconfianza lo nuevo, que se protege de los extraños, que no permite fácilmente la entrada, que Manizales es una sociedad cerrada, un poco tradicional, que cuida las apariencias. Y no diría que esto es bueno ni malo, solo diría que es algo que pasa. En el pasado ha protegido a la sociedad de un mayor deterioro y también ha impedido explorar nuevos caminos y posibilidades.
La apertura tiene que ver con la eliminación de todos esos juicios que tenemos sobre los que no son iguales a nosotros, los que no están a nuestra altura, los que no piensan como nosotros, los que se atreven a decir lo que no queremos oír, los que no se fijan tanto en las apariencias y se muestran como son.
Abrir la puerta sería una invitación poderosa con la cual me gustaría dejarlo en esta columna. ¿A qué necesitamos abrirle la puerta en nuestra vida? ¿Cuáles son esas posibilidades que todavía no hemos explorado? ¿Qué pasa si nos atrevemos a decir lo que pensamos? ¿Cuáles son los límites que necesitamos superar? Puede que nos equivoquemos, pero también existe la posibilidad de que encontremos nuevas alternativas y en el peor de los casos podamos aprender algo para el siguiente paso.
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