Nacido en la ciudad autónoma de Melilla, en la bella Andalucía española, hace 58 años, no es torero de postín, ni rejoneador de mucho garbo, ni arrebatado cantante de flamenco. 
En las fuentes bautismales recibió el nombre de José -el mismo del esposo de las once mil vírgenes- pero, como sucede siempre con los Chepes, sus amigos y relacionados, por puro cariño, lo llaman Pepe. 
Se apellida Levy -como muchos comerciantes judíos que escaparon a América de las temibles cámaras de gas del diabólico Adolfo Hitler- y es considerado una de las figuras más destacadas del periodismo televisivo de habla hispana.
Este personaje es tan sui géneris que a pesar de que se doctoró con honores en medicina oncológica, en universidades de Barcelona y Jerusalén, se permitió decirle no a Don Hipócrates y le dio el sí al llamado “cuarto poder” (el periodismo) que tres genios de palabra alada, (Albert Camus, Ernest Hemingway y Gabriel García Márquez) denominaron “el oficio más bello del mundo”. La Universidad Hebrea lo laureó con el premio Sheffield de Investigación de Cáncer.
Como en el viejo porro del cartagenero Daniel Lemaitre, (cantado por Matilde Díaz con el marco musical de Lucho Bermúdez), en materia noticiosa, doquiera se plante, micrófono en mano, ante una cámara, de este Pepe se puede decir que “no es que no apriete sino que sabe apretar”. Y le queda a la medida el desaparecido eslogan antañón que se le atribuye al inolvidable radiodifusor manizaleño Enrique Ramírez Gaviria: “Ahí donde hay noticias, ahí estamos”. Materia disponible para viajar de inmediato al sitio en el que se le requiera, Levy mantiene la maleta lista. En la visita del papa Francisco a Estados Unidos (2015) hizo para CNN -la cadena de sus amores- una llave formidable con el colega colombiano Juan Carlos López, flamante corresponsal en Washington.
Wikipedia -la enciclopedia libre- nos ofrece este perfil del gran trotamundos de las noticias, infaltable en todos los peregrinajes del pontífice argentino:
José Levy (Melilla, España, 1958) es un periodista y médico español. Desde 1989 se destaca como corresponsal jefe de la cadena de noticias estadounidense CNN en Israel, los Territorios Palestinos y el Medio Oriente. Levy también ha sido enviado especial en sucesos como la caída del Muro de Berlín, la caída de la Unión Soviética, la llegada del siglo XXI en Moscú, la muerte y la beatificación del papa Juan Pablo II, como así también la elección del papa Francisco.
En 1983 comenzó a realizar trabajos periodísticos para medios de comunicación de España y de los Estados Unidos y desde 1989 informa para la programación en español de CNN, de la cual fue designado primero corresponsal jefe en el Medio Oriente y después corresponsal internacional principal. 
Destacan sus coberturas de la enfermedad, fallecimiento y sepelio del papa Juan Pablo II, y la elección de su sucesor, Benedicto XVI. Previamente, siguió a Juan Pablo II en su peregrinación a la Tierra Santa, en sus visitas a Egipto y al Líbano, y estuvo presente en Roma durante el 25o aniversario de su pontificado y en la beatificación de la Madre Teresa de Calcuta.
La apostilla: Pepe Levy prefirió las operaciones periodísticas a las operaciones quirúrgicas contra el cáncer. Cuentan que un día le tomó así el pelo a un colega mientras les llegaba el cambio desde los estudios de Atlanta, Georgia:
- ¿Sabes quién tiene cáncer?
- ¿Quién?
- El Horóscopo...