19 son las hojas de vida que fueron entregadas para participar en la selección del nuevo gerente de la Federación Nacional de Cafeteros. Ya se hizo una primera selección y quedaron 8. El martes 21 de julio analizan las hojas en el Comité Nacional para conformar la terna que se le presentaría al Congreso Nacional extraordinario de Cafeteros previsto para el 12 de agosto. Estamos, pues, en la recta final del proceso que terminará con la elección del nuevo zar cafetero. No es una tarea fácil, pues el nuevo gerente tiene fundamentalmente tres grandes retos: profundizar el posicionamiento del café colombiano en los mercados internacionales; en segundo lugar, la complicada, esperada y necesaria renovación del gremio, que fue analizada a profundidad por la comisión cafetera; y finalmente, sintonizar de nuevo al gremio con las bases de los campesinos cafeteros y pequeños propietarios. Difícil encontrar alguien que combine todos estos requerimientos. Habrá que hacer alguna selección.

De la lista de 19 candidatos quisiera analizar cuatro de ellos: Luis Eduardo Gómez, Juan Guillermo Ángel Mejía, Aurelio Suárez y María Mercedes Cuéllar. Creo que estos cuatro pueden darnos una idea del tipo de candidatos que están en la lista de los 19. Confieso que no conozco a todos los 19 que hay en la lista.

Luis Eduardo Gómez, un hijo del gremio. Fue miembro y Director Ejecutivo del Comité de Cafeteros de Antioquia, luego funcionario de la Federación en el exterior y en la oficina central. Ha brillado en responsabilidades públicas como Finagro, donde profundizó y facilitó los mecanismos de crédito cafetero y sus respectivas refinanciaciones. Es cafetero, conoce bien la realidad del café a lo largo y ancho del país. A pesar de tener ADN de la Federación, lo que no le permitirá cambiar fácilmente de paradigmas, quienes lo conocen sostienen que es un ejecutivo abierto al diálogo, la discusión y la construcción colectiva de procesos. Es pues una opción que combina un profundo conocimiento del sector cafetero y sus instituciones junto con habilidades gerenciales que indiscutiblemente le hacen falta desde hace tiempo a la Federación. Pero puede ser, en cierta medida, figura del continuismo institucional. Con una hoja de vida de continuismo estaría también el nombre de Juan Esteban Orduz, funcionario también del gremio, a quien ya Portafolio designó como el preferido del Gobierno.

Juan Guillermo Ángel, un político de Risaralda. Ha sido congresista y ha tenido múltiples responsabilidades en el gobierno regional. Ha tenido cargos en distintos gobiernos nacionales. Es la persona que acuñó la expresión Eje Cafetero para referirse al Antiguo Caldas. No tiene una experiencia en el manejo de organizaciones empresariales, su trayectoria ha sido más en el campo público y en este más en lo político que en lo técnico. Un candidato que representa una línea que no siempre ha dejado los mejores resultados en el manejo institucional. Su conocimiento cafetero no es técnico. Sería un político reencauchado de líder gremial. Ya fue descabezado por el Comité Nacional.

Aurelio Suárez, un hijo de la disidencia cafetera. Profesor universitario especializado en el tema agropecuario, con múltiples escritos sobre el tema, y combativo dirigente social y muy cercano al movimiento de Dignidad Cafetera. Sería un cambio total de paradigma, que pondría a los pequeños caficultores como prioridad de la Federación. Se pasaría a una Federación mucho más democrática y cercana a los cafeteros campesinos y no de los empresarios. Un dirigente que le daría un nuevo rumbo al gremio. Su debilidad, que puede subsanarse con el equipo, es que no tiene experiencia empresarial. Su selección representaría una gran victoria de los movimientos sociales y una gran apertura para el gremio.

Finalmente, María Mercedes Cuéllar. Es una experimentada líder gremial, que acaba de terminar su ciclo en la Asociación Bancaria, y que ha tenido una experiencia en la política pública desde la Banca Central y Planeación Nacional. No sabe de café, eso debió pesar en la descabezada que le dio el Comité Nacional. Comparte el ingrediente femenino junto con la manizaleña Adriana Mejía Cuartas entre los 19 candidatos, lo que deja ver que el gremio cafetero aún es muy machista y con poca proyección de la mujer en su seno. Mejía pasó a la segunda ronda, sin embargo, hay personas cercanas que me dicen que la Gerencia General no es el lugar para ella, que está muy bien donde está: en el cargo internacional.

Hay otros personajes que han estado vinculados a la Federación en distintos cargos, sería muy bueno ser muy críticos con aquellos que desean llegar a la gerencia, cuando sus resultados en las responsabilidades que llevaron fueron muy pobres. No hay que tener amnesia ni selectiva ni parcial. De otra parte, se espera que el Gobierno a través del director de Planeación Nacional y los ministros de Hacienda y Agricultura no metan mucho la mano en la discusión gremial, pues si bien siempre se ha dado un "guiño" por parte del Gobierno al gremio, es importante que sean los cafeteros quienes hagan la selección y que no resulte, en la práctica, una imposición oficial.

Es una tarea complicada la que tiene el Comité Nacional de escoger la terna para llevar al Congreso Cafetero. Que tengan muy presente: deben seleccionar los nombres que aseguren los cambios urgentes que se deben aplicar al gremio. Las cosas no pueden seguir igual.