Es un hecho, Asia Pacífico es el nuevo gran mercado que se abre en el mundo y muy especialmente para nuestro país. Ya se ha comenzado a explorar las posibilidades de comercio. En efecto, las principales economías asiáticas, a saber, China, Japón, Corea, India y los países de ASEAN, representaban un 17,4% de las exportaciones totales de Colombia, mientras que las importaciones ascendieron al 28,6%.
Hay una alta concentración de dichas relaciones con China, que representa el 10,3% de las exportaciones y el 18,4% de las importaciones, lo cual indica que existen posibilidades inexplotadas en las demás economías asiáticas, con las cuales el nivel de estas relaciones es considerablemente bajo. Lo anterior nos obliga a seguir en la búsqueda de la diversificación de mercados, aprovechando el repunte de nuestra industria. Hay que ir a otros países, no solamente China.
El patrón de comercio característico de las relaciones comerciales con Asia es el de un comercio de tipo interindustrial en el que Colombia exporta, principalmente, productos primarios hacia el Asia e importa bienes industriales desde esta región. Colombia exporta a Asia productos tales como petróleo, ferroníquel, café, hulla, desechos de cobre y piedras preciosas, aunque hacia Vietnam y Filipinas ha crecido la exportación de productos de cierta elaboración. Las importaciones son muy diversificadas, aunque son principalmente bienes industriales, tales como, calderas, máquinas y sus partes, aparatos eléctricos y de grabación, tractores, automóviles y sus partes, computadores, etc.
Por otra parte, la balanza comercial es considerablemente deficitaria. Específicamente, el mayor déficit comercial es con China, que ha pasado de 455 millones de dólares en 2001 a 6.171 millones de dólares en 2014. Hay que ir a comprar, pero especialmente también a vender.
Los estudiosos han señalado que, a través de las ventajas comparativas reveladas, las posibilidades de incremento de las exportaciones de Colombia hacia el Asia estarían en productos tales como pescados y mariscos congelados, frutas, aceite de palma, piedras preciosas, vidrios, azúcar de caña, celulosa, cueros, colorantes, betunes, artículos de confitería, papel y cartón, dependiendo de los países en cuestión. ¡La lista es larga y diversificada!
Los empresarios colombianos tienen la palabra, si toman muy en serio las posibilidades de exportación y asumen el reto de incursionar en los mercados de estos países seguramente las exportaciones nacionales subirán. Hoy muchos industriales y comerciantes colombianos van a China y otros países asiáticos, pero con la meta de encontrar bienes baratos y no con la mentalidad de vender. Este es el gran cambio de mentalidad que debemos hacer.