En el informe sobre competitividad departamental, que publica anualmente el Consejo Privado de Competitividad (CPC), Caldas salió muy bien a nivel nacional, está de tercera este año. En efecto, luego de Bogotá y Antioquia, se ubicó Caldas con una calificación de 6,06 sobre 10 puntos la capital del país obtuvo 8,13. Es una muy buena posición, que la región debe explotar mucho más para atraer inversión, que unida a su calidad de vida y acogida por su gente, puede constituir en una maravillosa opción para instalar nuevos negocios. 
Este índice que es preparado por el CPC en conjunto con la Universidad del Rosario, busca medir la competitividad desde tres factores y 10 pilares. El primer pilar es lo que llaman las condiciones básicas, que son medidas por las instituciones, infraestructura, tamaño de mercado, educación básica y media, salud y medio ambiente. El segundo pilar es la eficiencia, medida por medio de la educación superior y capacitación, y la eficiencia de los mercados. Finalmente, el tercer factor, la sofisticación e innovación, que es monitoreado por la sofisticación y diversificación y, finalmente, por la innovación y la dinámica empresarial. 
El estudio analiza la situación concreta de Caldas: “Esta región tiene su mejor desempeño en el factor eficiencia, con un puntaje de 6,53 (puesto 2). En el factor sofisticación e innovación Caldas ocupa el sexto puesto, al obtener una calificación de 5,26. Finalmente, en el factor condiciones básicas este departamento ocupa la novena posición con un puntaje de 5,83. El puntaje global de Caldas es 25,4% inferior al de Bogotá, lo cual está explicado por rezagos de 45,3%, 20,4%, y 16,6% en los factores sofisticación e innovación, eficiencia, y condiciones básicas, respectivamente”. 
Lo que quiere decir que en el campo de la innovación y sofisticación hay que crecer, y este aspecto la región lo podrá mejorar rápidamente si logra una articulación mayor entre las universidades y la empresa privada. Proyectos como el de biotecnología y bioinformática, son un ejemplo maravilloso de esa articulación. De otra parte, como en otros departamentos, es fundamental no descuidar las condiciones mínimas que tienen que ver con educación y salud. Es importante ganar en cobertura y calidad de estos servicios. 
La gran tarea que tiene Caldas es vender esa competitividad. Y esto tiene que ver con el mercadeo de la región, con la capacidad de articular esfuerzos de promoción y atracción, por parte del sector público y privado, de nueva inversión. Y a esto los nuevos gobernantes electos deben focalizar sus esfuerzos, convocando y aunando esfuerzos con la empresa privada.