Guillermo O. Sierra


Hice referencia expresa en mi columna anterior a la visión de futuro que, desde la institucionalidad, comparten los gobernadores -y ciudadanos en general-, de los departamentos de Cauca, Nariño, Valle y Chocó, quienes conjuntan voluntades políticas para transformar las condiciones de vida de ese territorio patrio que ellos mismos denominan como el "santuario" del pacífico colombiano.
Y mencioné que conviene referir, en esta oportunidad, de manera breve el tema de la Alianza Pacífico, la misma que, desde mi prejuicio, bien podría lograr que esta biodiversa región se siguiera escribiendo con zeta: Pazífico.
En América del Sur, los países que integran la Alianza Pacífico: Chile, Perú, Colombia y México (en el primero de éstos se habla de regiones, en el último de estados; y, en los otros dos, de departamentos), presentan asimetrías en sus indicadores socioeconómicos; y los del Pacífico colombiano, al parecer, son los que registran las situaciones más críticas. Según los datos del Centro nacional de productividad, el indicador de pobreza extrema es mayor en Colombia que en los demás países mencionados. Aquí la cifra es del 24%, seguido de México con poco más del 12%; Perú con el 5% y Chile con un poco más del 2%. En lo referente a las necesidades básicas insatisfechas, el 46% aproximadamente lo presentan México y Colombia; Perú con poco más del 35%; y por último Chile con el 11%. En el Pacífico colombiano, el desempleo alcanza la cifra del 12%, en México y Perú, poco más del 4%; y en Chile, poco más del 6%. En analfabetismo (edad mínima 15 años), Colombia, registra el 11%, y el más bajo, Chile con casi el 4%; en México, alcanza el 8%; y en Perú, poco más del 5%.
Frente a este panorama, la pregunta obligada es ¿cómo materializar los sueños y esperanzas de mejorar las vidas de estos ciudadanos, a partir de la reducción sustantiva de estas cifras que acabo de describir? Nuestra región Pacífico colombiano realmente presenta los mayores atrasos no solo en los temas que menciono, sino también en el coeficiente Gini, en el acceso a los servicios públicos, y hasta en el mismo índice de Desarrollo Humano. Me parece que la Alianza deberá convertirse en una inmensa estrategia para que estas regiones que conforman el Pacífico de estos cuatro países puedan estar a la altura de la región quizás más promisoria del mundo que no es otra que Asia Pacífico.
Por esto creo que en Colombia, los ciudadanos y gobernantes, todos juntos, debemos estimular el trabajo de regiones. No olvido que aquí se habló, otrora, de los Estados soberanos del Cauca, Cundinamarca, Tolima, Bolívar, Santander y Antioquia, entre otros. Y el modelo de gobierno y de gobernanza que se creó a partir de la Constitución del 86, fracasó, sobre todo, en la prestación de los servicios públicos. Justamente por eso pregunto ¿qué sentido tiene seguir pensando en departamentos?
Pensar en las regiones, para el caso que cito hoy por segunda vez, el Pacífico colombiano, conlleva considerar de manera responsable y juiciosa en cómo subsanar el empobrecimiento y la desterritorialización de muchos ciudadanos; en la nefasta planeación centralizada y en modelos de desarrollo que no tienen en cuenta las condiciones propias de la vida y de la infinita biodiversidad que aquí subsisten; y pensar, con la más completa seriedad política, el asunto del paternalismo y del clientelismo que vuelven ingobernables estas zonas del suelo patrio.
En Colombia, la Alianza Pacífico debe poner todo su acento en la relevancia de la estratégica ubicación de la cuenca del Pacífico, en la defensa de los derechos patrimoniales de los ciudadanos y en sus propias culturales ancestrales. Y no puedo dejar de mencionar, la inmensa tarea que desde la academia tenemos las universidades con la biotecnología, la genética, la telemática y la informática para la conservación de nuestra biodiversidad. Así sí podríamos escribir Pazífico colombiano, y no seguir esperando las firmas en La Habana.
El uso de este sitio web implica la aceptación de los Términos y Condiciones y Políticas de privacidad de LA PATRIA S.A.
Todos los Derechos Reservados D.R.A. Prohibida su reproducción total o parcial, así como su traducción a cualquier idioma sin la autorización escrita de su titular. Reproduction in whole or in part, or translation without written permission is prohibited. All rights reserved 2015