John Harold Giraldo Herrera

Lumièradas
En la niñez se fundan las bases de la arquitectura de la vida. Y algunos de los mitos con los que convivimos, con las historias que han ampliado o reducido nuestro panorama, vienen de unos autores que los recogieron, de la tradición de los ancestros, de unos rituales culturales con los que nos hemos quedado. Si usted, que lee, se acuerda de los Gremlins, y ha soñado alguna vez con un Melocotón gigante, si pensó que un ascensor podría ser de cristal y viajar a todos lados, si a lo mejor se creyó Willy Wonka y atesoró una gran fábrica de chocolates, si quiso tener un amigo gigante, si tuvo cuentos para jugar porque los finales podían ser varios, si creyó ser como Matilda la niña que estuvo sola pero acompañada por los libros que leía, en fin… se cumplen 100 años del natalicio de uno de los escritores para niños (adultos también) que marcó muchas infancias y que dejó una serie de historias para la posteridad: el británico pero universal Roal Dahl. Quien nos entregó más de dos docenas de libros que han sido películas y abrebocas para aquellos que quieren deleitar su imaginación.
Steven Spielberg ha dirigido una película para ese natalicio: Mi gran amigo el gigante bonachón. Una donde una infante se encuentra en un orfanato y decide aprovechar las noches para su diversión. Allí se encuentra con una extraña criatura que la descubre y empezará una aventura por un mundo que le proporcionará no sólo una compañía sino unas dimensiones de amor por los sueños. Pareciera que en la literatura clásica para niños y en el cine que retoma estas historias, los niños se encuentran desamparados y otros que no son los adultos les generan lo que necesitan: afecto, apertura del mundo, saciar la curiosidad, contar con un lado de diversión, y entonces muestran como los adultos se encerraron o son aburridos como lo dice el francés Exúpery en El Principito, o al tiempo son abusadores o faltos de perspicacia para con los más pequeños.
El gigante bonachón, desprevenido, quien atraviesa el otro lado de la realidad como lo hiciera Alicia, en cambio le ofrece a Sofi, un amor inusitado, no es paternal ni tampoco de eclipses, se gesta en medio del andar y el recorrer. Al ver esta película, desde luego que no estamos ante el mundo fastuoso y tan creativo de Spielberg, pero sí ante un drama que nos ubica en susurros misteriosos, enigmáticos, hechos con la ternura y bondad que escasea. Los grandes, al ver a ese gigante lo asumen con un grado de empatía, mientras que la niña se va quedando como en una mirada de desarraigo, que pronto hallará un reconocimiento.
El escritor Roal Dahl ha escrito en unas obras muy apremiantes. Ponerlas en relación con los entornos escolares, promoverlos en la familia y entre los niños ha de ser una labor constante. Vemos como al activar el campo sensorial un niño puede desplegar sus alas. La imaginación no tiene que ser para alejarnos de lo cercano, nos estimula a pensar y repensar lo que ocurre. El amigo gigante es una metáfora también de la pequeñez del mundo que le hemos hecho los adultos a los niños y como los encerramos en unas parcelaciones diminutas que requieren ser transgredidas. Roal lo hizo y permitió que subiéramos algunos niveles en las dimensiones lúdicas de la existencia. Él mismo pensaba en el libro de Matilda que: “Un niño lector será un adulto que piensa”, y al trastocar, reinventar el lenguaje, podemos fundar un mundo que borre esos cercos limitantes que se nos han impuesto.
Ficha técnica
Año: 2016
País: Estados Unidos
Duración: 117 minutos
Director: Steven Spielberg
Guion: Melissa Mathison (Cuento: Roald Dahl)
Música: John Williams Fotografía: Janusz Kaminski
Actores: Mark Rylance, Ruby Barnhill, Penelope Wilton, Jemaine Clement, Rebecca Hall, Bill Hader, Rafe Spall, Adam Godley, Matt Frewer, Ólafur Darri Ólafsson, Haig Sutherland y Michael Adamthwaite
Productora: Amblin Entertainment / DreamWorks SKG Género: Fantástico | Monstruos. Infancia. Cuentos
El uso de este sitio web implica la aceptación de los Términos y Condiciones y Políticas de privacidad de LA PATRIA S.A.
Todos los Derechos Reservados D.R.A. Prohibida su reproducción total o parcial, así como su traducción a cualquier idioma sin la autorización escrita de su titular. Reproduction in whole or in part, or translation without written permission is prohibited. All rights reserved 2015