Caldas actualmente es muy diferente al departamento antiguo existente a principios del siglo XX y totalmente distinto a lo que existía entre la fundación de los primeros villorrios y la creación de la nueva jurisdicción político- administrativa de la República.

La diferencia geográfica y por lo tanto de territorio, es concluyente. Los motivos y los causantes de la desmembración de dos porciones del Caldas, la mariposa emblemática, aún tiene áreas oscuras que impiden la explicación completa de lo que sucedió y todavía está borroso el dato de quienes se beneficiaron personalmente de esa determinación.

Los colonizadores estaban construidos de manera diferente y tuvieron una indómita decisión en la búsqueda de nuevos espacios. Relatos extensos y suficientemente conocidos dan testimonio de lo que sucedió. A partir de ellos se formaron los núcleos de ciudadanos de cuyas descendencias se nutre hoy el departamento otrora llamado Modelo, del cual aún persisten rasgos.

No se puede dudar que a lo largo de la existencia de las poblaciones caldenses han existido líderes que han fortalecido la vida y el desarrollo de las comunidades en donde han establecido sus quehaceres.

Los nombres fluyen y se identifican sus actitudes las cuales promovieron maneras de ser y obras que desparecieron, por razones tampoco totalmente esclarecidas, y otras que para bien de todos persisten.

Los líderes eran reconocidos y seguidos, muchos de ellos políticos, religiosos o cívicos. Algunos encarnaban más de un papel y fueron guía de su pueblo como el inmenso médico Jaime Isaza Sánchez en Santa Rosa de Cabal o el incansable presbítero Adolfo Hoyos Ocampo o la matrona Merceditas Berrío de Mejía o el gigante Gilberto Alzate Avendaño o el príncipe Otto Morales Benítez, en Caldas. Para ellos y muchos otros, los historiadores han enunciado y contextualizado sus acciones que merecen pedestales.

La vida y obra de los que han forjado a Caldas, es digna de distinción para ejemplo de quienes hoy viven y buscan espacios en bien de los demás. Bien por los reconocimientos anuales pero se van quedando en el olvido, falta grave, numerosos que han dedicado su existencia, día tras día, a cumplir con los suyos, todos, y a forjar el futuro, sin declinar su meta a veces apabullada por fanfarrones de turno.

¿Dónde están los líderes caldenses de hoy y quiénes son? La pregunta puede ser respondida de diferente manera y con diversas connotaciones. ¿Existe actualmente uno o una que encarne de manera universal un liderazgo contundente? Cada quien debe pensar y expresar, si lo quiere, o simplemente mantenerlo en su interior. Pero a los adalides hay que reconocerlos, seguirlos o controvertirlos de una manera franca presentando alternativas y no simplemente distanciarlos con un no rotundo sin razonamiento alguno.

A manera de exploración: ¿Puede mencionar tres ingenieros líderes en su área, reconocidos ampliamente en las comunidades por su liderazgo caldense? De igual manera: Industriales, comerciantes, médicos, abogados, profesores, agrónomos, arquitectos, administradores, cafeteros, ganaderos, contadores, universitarios, periodistas de cualquier medio, economistas en cualquier disciplina, y así la lista de profesiones u oficios puede construirse de manera extensa pero finalmente: ¿Cuántos y cuáles serían los lideres?

Se dirá que el liderazgo tiene un riesgo y puede convertir en un caudillo a un ser humano de calidades tan avasalladoras que puede transformarse en un ídolo, con lo cual no se está lejos de la realidad. Han existido caudillos de procedencia política en el país y los ejemplos están ahí, inclusive caldenses.

Pero también han trasegado por Caldas muchos que de manera reservada han ideado, construido y fomentado muchas obras de beneficio comunitario sin que requieran reconocimiento diario en letras de molde o su faz aparezca en televisión o su voz se escuche frecuentemente a través de las radiodifusoras. Ellos son líderes que merecen el reconocimiento por su labor solidaria y jamás desearán un voto en las urnas.

Finalmente: ¿Todo político es líder? O,: ¿Todo líder es político? Las respuestas serán tan diferentes como cada quién tenga una idea del significado de líder: teórica y pragmática. Pero frecuente y lamentablemente se identifica la conducta de: ¡Sálvese quien pueda!