Respecto a las grandes inversiones hechas por el municipio de Manizales con dineros públicos se destacan dos por su importancia, impacto, el monto, y las dificultades que afrontan: Aerocafé y el Proyecto de Renovación Urbana de San José. 
En ambos proyectos hay comprometidos cuantiosos recursos de los manizaleños y su planeamiento y ejecución han sido deficientes, por no decir otra cosa.
Independientemente de las investigaciones penales, disciplinarias, el juicio político y la sanción social que se debe derivar de la improvisación e impericia en su ejecución, la ciudad debe tomar una decisión hacia el futuro y esta no puede aplazarse más.
Lo primero es un diagnóstico sobre la viabilidad técnica de Aeropalestina porque el proyecto parece que no es costeable por su propia operación, es decir, Aeropalestina es un enorme fracaso financiero según los conceptos casi unánimes de los técnicos del sector aeronáutico. En consecuencia, urge saber a ciencia cierta si ese aeropuerto es construible y operable, para qué clase de aeronáutica y cuánto vale terminarlo.
La Nubia está en mora de recibir una sepultura con grandes honores por su deber cumplido más allá de sus propias posibilidades, y debe pasar a ser un espacio público cultural para disfrute de todos. 
Manizales tiene que optar entre hacer su aeropuerto o depender por el mandato imperativo de la naturaleza de nuestro vecino. Si hay una posibilidad de ejecutar el proyecto, todos los manizaleños, y en especial nuestra “fuerza parlamentaria”, debe obtener recursos del presupuesto nacional para culminarlo hasta ponerlo en operación lo más pronto posible.
El proyecto de renovación urbana de San José, en cuya ejecución también se cometieron errores de concepción, prospección y planeación tiene que terminarse. Hacer borrón con los errores, aprovechar lo positivo y los avances del proyecto, refinanciarlo y ejecutarlo con visión de grandeza y mejoramiento urbano sin cicaterías ni provincianismos. Allí no deben construirse los precarios edificios de vivienda gratis tan inhumanos, tan feos, tan estalinistas, ni edificios cuadriculados, anodinos. 
Ese espacio, uno de los más bellos y privilegiados de Manizales puede ser sede de los edificios nacionales, (los que debemos exigir que se construyan aquí como lo hacen las ciudades vecinas), de una gran biblioteca pública y Museo de Arte Moderno que Manizales está en mora de construir, profundizando en su tradición de cultura y academia. Allí deben estar las IPS que hoy se riegan por la ciudad funcionando en zonas residenciales, sin parqueaderos, en edificaciones inapropiadas y hasta en condiciones peligrosas para la salud de los pacientes y los vecinos. Cabrían allí sedes universitarias y colegios etc. 
Lo que propongo es un nuevo centro moderno diseñado con grandeza que enriquezca nuestra sociedad y mejore la calidad de vida de los ciudadanos. Para eso se concibieron los Planes de Ordenamiento Territorial, esa es la razón de ser de la enorme autoridad que los POT le confieren a la autoridad municipal. 
Aerocafé y el Proyecto de Renovación Urbana San José, deben retomar su importancia y ser objetivos de este y el próximo gobierno. 
P.S.: A las madres en su día Honor, Agradecimiento y Amor.