Alberto Valdés
EFE | LA PATRIA | Chile
Dos minutos de oscuridad en pleno día y un silencio sepulcral que invita a reflexionar tras un año catastrófico. Así vivió la comunidad mapuche Mateo Nahuelpán el eclipse solar que este lunes ensombreció Sudamérica y que está llamado, según este pueblo indígena, a "restablecer el equilibrio".
Encaramados en la cima del cerro Monkul Wingkul, en la región de La Araucanía, una treintena de personas avistó el fenómeno astronómico sobre las 13:00 hora local (16:00 GMT), cuando la Luna proyectó una sombra sobre la Tierra, bloqueando totalmente la luz del Sol.
Para los mapuches, la etnia más mayoritaria de Chile, el eclipse o "lan antü", en lengua mapuzungún, significa "la muerte temporal del sol" e implica aprendizaje y cambios a cualquier escala.
"Hay otras versiones que hablan del restablecimiento del equilibrio y el surgimiento de un nuevo ciclo, ambos procesos necesarios para poder mantener la armonía de la naturaleza y de los seres que habitan en la madre tierra", explicó a Efe la dirigente de la comunidad, Estela Nahuelpan.
Antes de que el cielo se tornara negro, la comunidad le dedicó a Ngenechén, considerado como el "Ser Supremo" en la religión mapuche, varias oraciones y un baile con ramas de árboles e instrumentos musicales de viento, como la "pifilca".
La penumbra total cubrió una franja de unos 90 kilómetros de norte a sur, sobre las ciudades de Villarrica y Pucón (La Araucanía), pero la lluvia y la alta nubosidad "arruinaron" el mágico espectáculo en algunas partes de la "zona cero" del eclipse.
"El gran mensaje que hoy nos entrega la naturaleza es que tenemos que observar, aprender y respetar lo que ella nos quiere transmitir. Hoy todos esperábamos un sol maravillosa para avistar el eclipse, pero tenemos lluvia y, a través del agua, nos está entregando la vida", dijo Nahuelpan.
La naturaleza, agregó la dirigente, "nos está transmitiendo que no necesariamente lo que nosotros queremos es lo que necesitamos".
"Los animales se relajan"
A los pies del cerro Monkul Wingkul, un rebaño de ovejas se acostó en la hierba cuando la luz empezaba a apagarse y una banda de pájaros buscaba ramas de árboles para posarse.
"Los animales sienten que llegó la noche y se relajan. Así es la naturaleza. No solo los mapuches sentimos paz, todos los seres de la Tierra", aseguró a Efe Isolina Huenulao, habitante de una comunidad cercana a Mateo Nahuelpán y una de las primeras mujeres mapuche en regentar una pequeña viña.
El fenómeno, que en 2019 fue visible en el norte de Chile y este año atrajo a miles de turistas y científicos al sur pese a la pandemia, también fue avistado en el sur de Argentina y, en menor medida, en Perú, Paraguay o Uruguay.
En Santiago, donde miles de personas se agolparon en las calles con gafas especiales para mirar al cielo, el eclipse se observó con cielos completamente libres de nubes pero con un porcentaje menor de visibilidad, del 78 %.
"Quería ir al sur a ver el eclipse, pero no pudimos por la pandemia, así que estamos aquí en el Cerro San Cristóbal (un monte en el centro de la capital). Hay poca gente con respecto al año pasado, yo creo que muchos prefirieron verlo desde su casa para resguardarse", afirmó a Efe la profesora Paulina Castro.
Según el astrónomo Hugo Messias, miembro del observatorio ALMA, el más grande del mundo y ubicado en el Desierto de Atacama (norte de Chile), lo interesante de un eclipse como el ocurrido este lunes es observar la corona solar, que es el resplandor alrededor del Sol eclipsado por la Luna que en esta ocasión fue mucho más asimétrica que en otras ocasiones.
Además, detalló, esta fue una ocasión única para los científicos "para apreciar los campos magnéticos saliendo de los polos del Sol".
Atractivo turístico
Argentina vivió este lunes un eclipse total de sol que, pese a que se pudo ver en todo el país en algún grado, afectó principalmente a la Patagonia, a la que se desplazaron turistas para observar el fenómeno pese a las restricciones por la pandemia de coronavirus.
El eclipse comenzó a las 1:08 p.m., hora local, y tuvo una duración máxima de 2 minutos y 9 segundos en los lugares comprendidos por la "franja de totalidad", de unos 100 kilómetros de ancho, que incluye las localidades de Junín de los Andes, Piedra del Águila, Aluminé y Pilolil (todas en la provincia de Neuquén), y Sierra Colorada, Valcheta, Las Grutas y La Lobería, estas pertenecientes a la provincia de Río Negro.
El fenómeno pudo verse en todo el país con distintos grados de profundidad, y en las provincias del extremo norte del país la Luna sólo cubrió un 50 % o 60 % del diámetro solar, mientras que en la zona central, y en el norte de la Patagonia, el porcentaje de cobertura fue del 80 %, 90 % y hasta el 99 %.
En la ciudad de Buenos Aires, ubicada al norte de la "franja de totalidad", se pudo ver una cobertura máxima del 79 % a las 1.32 p.m., hora local y uno de los puntos de mayor afluencia para observarlo fue el planetario, en cuyos jardines aledaños se reunió un grupo de gente.
Pese a las restricciones de movilidad que todavía existen en algunos puntos del país para frenar la pandemia, las autoridades esperaban la presencia de turistas en la" franja de totalidad", aunque en el caso de los extranjeros, su llegada "depende de una autorización del Ministerio del Interior e incluso por los pasos terrestres", indicó el subsecretario de Turismo de Neuquén, Germán Bakker.
"A partir de la apertura del turismo del 1 de diciembre esperamos recibir turistas que puedan disfrutar del eclipse. En particular, el foco estará en Piedra del Águila y también en Junín de los Andes, siempre tomando los recaudos necesarios de seguridad sanitaria", precisó Bakker.
En Piedra del Águila se habilitó "un predio de dos hectáreas para recibir a la gente, con todos los servicios y protocolos", en el que habrá otros espectáculos culturales como el concierto de la banda de rock argentina Vanthra, que será retransmitido por la televisión y radio públicas de la provincia.
Un eclipse solar ocurre cuando la Luna pasa entre la Tierra y el Sol, tapando total o parcialmente el disco del Sol para un espectador en la Tierra, y en este caso se vio en Ecuador, Perú, Bolivia, Chile, Argentina, Uruguay, Brasil, Paraguay y los océanos adyacentes.
El último eclipse de estas características se pudo ver en Argentina el pasado 2 de julio de 2019, cuando la "franja de totalidad" tocó las provincias de San Juan, La Rioja, San Luis, Córdoba, Santa Fe y Buenos Aires.
El uso de este sitio web implica la aceptación de los Términos y Condiciones y Políticas de privacidad de LA PATRIA S.A.
Todos los Derechos Reservados D.R.A. Prohibida su reproducción total o parcial, así como su traducción a cualquier idioma sin la autorización escrita de su titular. Reproduction in whole or in part, or translation without written permission is prohibited. All rights reserved 2015