ANDRÉS RODELO
LA PATRIA | RIOSUCIO
Una mujer corre asustada mientras un avión le dispara a una casa. El instante lo plasmó Mario*, un reintegrado de las Farc, en una pintura, y recuerda el hecho que inspiró la obra: “Ocurrió en un caserío cercano a Santo Domingo (Cauca), en los primeros años de la década del 2000. Fue un avión de la Fuerza Aérea. La mujer era una civil que salió asustada. No hubo víctimas, pero destruyeron dos casas”.
Mario ahora vive en Riosucio (Caldas), en donde realizó este cuadro gracias a los talleres del Modelo de Reintegración Comunitaria (MRC), iniciativa de la Agencia para la Reincorporación y la Normalización (ARN) que se adelanta en ocho puntos del país, entre ellos los resguardos indígenas de Nuestra Señora de la Candelaria y de Cañamomo y Lomaprieta, en Riosucio.
El programa fomenta espacios de confianza y comunicación entre movilizados de las Farc, las comunidades que los acogen y víctimas del conflicto. El objetivo es facilitar la adaptación de los excombatientes a la vida civil con la resolución pacífica de conflictos y el emprendimiento de obras para mejorar el entorno como ejes transversales.
Reparación
La ARN y el Programa de Reintegración y Prevención de Reclutamiento de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), que también apoya el proceso, presentaron el viernes en Cañamomo y Lomaprieta los resultados que ha tenido la estrategia en lo corrido del 2018 en estos lugares del departamento.
Mario da cuenta de los frutos: “Pintando y estudiando se olvida uno de las cosas de la guerra”, indica sobre la pintura que elaboró en un taller del MRC.
Tres poblaciones participaron en la iniciativa: excombatientes de las Farc que dejaron las armas antes del Acuerdo de Paz (reintegrados), excombatientes del grupo guerrillero que dejaron las armas como fruto del Acuerdo de Paz (reincorporados), y víctimas del conflicto armado. LA PATRIA habló con un representante de cada una.
* Los nombres se cambiaron para proteger las identidades de las fuentes.
Dolor y revelación
Mercedes Tapasco tiene 51 años. Ella fue desplazada por la violencia en el 2001 del resguardo Cañamomo y Lomaprieta, al que volvió en el 2003 luego de que integrantes de un grupo armado ilegal mataron a su esposo, Gabriel Ángel Cartagena. Él iba de camino al resguardo de San Lorenzo para presentar su candidatura a la Alcaldía de Riosucio.
“La comitiva fue atacada en el sitio La Herradura con granadas y disparos”, señala sobre este momento doloroso, pero también revelador: “Entendí que debía defender los derechos de las víctimas”, razón por la que hoy es coordinadora de la Mesa de Víctimas de Riosucio y representante de la Asociación de Víctimas del Resguardo Cañamomo y Lomaprieta.
Mercedes Tapasco es coordinadora de la Mesa de Víctimas de Riosucio y representante de la Asociación de Víctimas del Resguardo Cañamomo y Lomaprieta.
Su labor al servicio de quienes sufrieron la guerra y el hecho de entrar en contacto con excombatientes, gracias al Modelo de Reintegración Comunitaria, la hizo percatarse de algo: “Muchos victimarios son víctimas reclutadas a la fuerza”.
El diálogo y la comprensión son los caminos para lograr la paz, asegura, valores que ayuda a promover en el MRC. Mercedes afirma que esto lo deben entender las antiguas generaciones, pero sobre todo las nuevas: “Debemos dejarle un país en paz a los niños. El embarazo de mi hijo en el momento en que mataron a mi esposo me ayudó a entenderlo”.
De vuelta a casa
A Jorge Eduardo Gañán Tapasco, de 41 años, lo acogieron en el resguardo San Lorenzo luego de ser combatiente de las Farc por nueve años. “Me dieron la oportunidad de reintegrarme”, dice sobre la comunidad que lo vio nacer y en la que grupos armados ilegales mataron personas.
“Me disculpé en nombre de la organización. No participé en estos hechos, pero les pedí disculpas porque integré una guerrilla que fue responsable de varias de estas muertes”. Gañán está enfocado ahora en trabajar por San Lorenzo al participar en las iniciativas del MRC que buscan el progreso de la comunidad.
“Formamos grupos juveniles, hacemos trabajos sociales. El Modelo es la oportunidad para que la gente sepa que queremos luchar y trabajar por todos”, asegura.
Jorge Eduardo Gañán, reincorporado de las Farc.
Una vida difícil
Uniformados de las Farc tenían el propósito de reclutar a un hermano de Roberto*. Llegaron a su antigua casa, ubicada en un punto del Chocó cerca al Río Atrato, y se llevaron a Roberto por error. “Mi hermano tenía 12 años y se parecía a mí. Yo tenía 8 años”.
A partir de allí, el joven de 20 años inició una experiencia con la que no se sintió a gusto. “No vivía tranquilo. Todo el tiempo estaba pendiente de a qué hora nos iban a llegar (el Ejército y los paramilitares). Fue muy difícil”, explica.
El Ejército lo rescató en el 2013, momento en el que pasó a ser reintegrado. “Vivo en Riosucio. Participo en el Modelo de Reintegración Comunitaria y en mi contacto con las víctimas les demuestro que no soy el mismo de antes. Mi reclutamiento fue obligado, les digo. Ahora solo quiero salir adelante y trabajar por los demás”.
Roberto, reintegrado de las Farc, observa un cuadro que pintó y en el que plasmó recuerdos de la guerra.
Autoridades
* Lucas Uribe, Agencia para la Reincorporación y la Normalización
Buscamos fortalecer el tejido social para sembrar las bases que el país necesita de cara a una no repetición del conflicto.
* Camila Sabogal, Prevención de Reclutamiento de la Organización Internacional para las Migraciones
Las apuestas de formación del Modelo son desde lo cultural, lo económico y lo familiar.
* Pastor Alape, excomandante de las Farc
Esto es una acción para construir paz y reconciliación desde el territorio.
* Darío Esgardo Tapasco, secretario de Gobierno de Riosucio
La Alcaldía participó en el MRC con la construcción de una cancha y de una casa de la cultura.
Cifras
- La implementación del MRC en Riosucio se paga con $25 millones invertidos por la Agencia para la Reincorporación y la Normalización, la Organización Internacional para las Migraciones y la Alcaldía del municipio.
- 100 habitantes de los resguardos Nuestra Señora de la Candelaria y de Cañamomo y Lomaprieta y 37 excombatientes de grupos armados ilegales participan en el MRC de Riosucio.
- Este municipio de Caldas sufrió 5.411 hechos victimizantes durante el conflicto armado, según el Registro Único de Víctimas. Los responsables fueron las Farc, paramilitares, organizaciones vinculadas al microtráfico y el Ejército Nacional.
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