Julián García
LA PATRIA /MANIZALES
Alumnos de colegios públicos de Manizales y de otros municipios de Caldas van los viernes a la Cárcel La Blanca de Manizales. Allí tienen un acercamiento con el diario vivir de los internos, quienes les cuentan sus historias. Se trata de la campaña Delinquir no paga.
La experiencia la han vivido alumnos de cuatro instituciones educativas: Bostón, Asunción, Maltería, de la capital caldense, y la Institución Llanadas, de La Merced.
Los alumnos reciben los jueves charlas de prevención de la violencia y la drogadicción. También observan fotos del penal. Los viernes recorren el centro penitenciario.
Los del grado 11, del colegio La Asunción, estuvieron el viernes en la Blanca. Como todos los visitantes pasaron por requisas, que incluyeron el olfateo del canino- antinarcóticos.
Las directivas les recomendaron acatar las órdenes y hubo una demostración del perro-antidrogas.
Dinámica
La dinámica consistió en que a los estudiantes les vendaban los ojos y caminaban hacia el patio 2. Por el trayecto, los presos los abucheaban y les gritaban cosas. Un guardián les dijo que estuvieran tranquilos, que nada malo les iba a ocurrir.
Cuando llegaron al patio se encontraron con que las celdas estaban vacías. A esa hora de la mañana los reclusos se encontraban en sus tareas.
Seis internos, destacados por buena conducta, expusieron sus historias de vida. Por ejemplo, que estaban allí pagando condenas de hasta 20 años por narcotráfico, homicidio y porte ilegal de armas. Uno contó que su novia paga condena en la cárcel de mujeres Villa Josefina por tráfico de drogas. "Esto es otro mundo, las visitas son los días sábado y domingo, y la comunicación con el exterior es nula”, relató.
Los internos mostraron las celdas donde duermen, que miden dos metros cuadrados. Les enseñaron también los baños y un lugar de castigo. Narraron que debían salir al patio a la 5:00 de la mañana y regresar a la celda hacia las 3:00 de la tarde. Después de esa hora no reciben sol.
Hubo también un dramatizado en el que simularon una revuelta o motín. Los reclusos recomendaron evitar las malas amistades y no delinquir.
Experiencias
El programa Delinquir no paga va dirigido a niñas, niños y adolescentes desde los 14 años en adelante. Claro que también pueden participar los adultos interesados.
Por fuera de las rejas los estudiantes y un profesor comentaron la experiencia.
El docente Alcibíades Blanco contó que 30 alumnos de la Asunción participaron de la jornada y en el colegio han implementado el modelo pedagógico Escuela Activa Urbana, que habla de la cotidianidad y la autonomía.
El estudiante Jonathan Londoño, por su parte, indicó que llevaban un mes recogiendo elementos de aseo para donarles a los reclusos. En casa le recomendaron que escuchara las experiencias.
Añadió: “Debemos tomar esos mensajes para no llegar a caer en estos lugares, valorar la vida y apreciar a la familia. Me impactó el recluso que dijo que estaba condenado a 43 años y ya no le importaba nada en la vida”.
Jonathan Londoño
Me parece buena esta experiencia, aprendí que por un pequeño error puedo perder el derecho a la libertad.
Liseth Bermúdez
Creo que estar en la cárcel es una experiencia dura, debemos de cambiar la mentalidad y evitar caer acá.
Manuela Morales
Me parecieron muy duras las historias de vida de los internos, no me gustaría venir a parar a este lugar.
Kenny Ortegón
Aprendí a valorar la libertad y las cosas buenas de la vida.
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