Óscar Gómez Salazar
LA PATRIA|Arboleda (Pensilvania)
Desde hace seis años, familias de Arboleda residentes en Manizales, llegan hasta la lejana vereda de Samaria, corregimiento de Arboleda (Pensilvania), para compartir con los niños y la comunidad un encuentro lleno de amor y alegría.
La comisión debe cumplir una larga travesía de cinco horas por el camino, a pie y a lomo de mula, hacia la cordillera Central, atravesando hondonadas y ríos hasta la vereda Samaria, territorio duramente afectada por el conflicto armado, habitado por gente humilde y trabajadora, y donde es evidente el abandono del Estado.
Samaria fue un pequeño poblado donde se asentaron las familias Trujillo, Cardona y Flores. Había una capilla, una escuela, una inspección de Policía, una calle y 10 viviendas.
Una avalancha del río ahogó a cuatro campesinos y destruyó las viviendas. Luego vino la crudeza del conflicto, la matanza de ocho campesinos el 7 de enero del 2004, y esto provocó la emigración. La vereda quedó casi desierta por el desplazamiento forzado.
Luisa Fernanda Duque Castrillón, joven funcionaria de Manizales, hija de educadores de Arboleda, ha sido la gestora de esta bella iniciativa.
“Llevamos 6 años haciendo la fiesta para los niños y la comunidad, sin tregua”. Los niños de Samaria ya sonríen cuando ven llegar a este grupo de personas, ataviadas con bolsas y costales. Saben que será un día de fiesta. Los niños, niñas y comunidad asisten al evento donde se realizan actividades lúdicas deportivas y recreativas, entregan regalos y hay cerdo navideño.
Luisa Fernanda explica: “Varias personas nos aportan para que la fiesta sea una realidad llena de amor y alegría, nosotros nos encargamos de llevarlos hasta Samaria. Es muy gratificativo para todos”.
Hacen parte de ese grupo de colaboradores la familia Duque Castrillón, Óscar Salazar, Hilda Salazar, Gladis Emilsen Giraldo e hijos, Carmen Rosa Giraldo, Karol Ximena Ramírez, Víctor Hurtado, Lina Daza, María Juliana Arango, Juan Guarín y Germán Páez.
Cuando la comisión abandona la vereda, una salva de aplausos y abrazos los despide, agradecidos por tanto amor y fraternidad sembrados en aquellos fértiles campos de la región.
Los paisajes son el mejor pago para estas personas que llevan felicidad a los niños de Samaria.
Actividades para los niños realiza Luisa Fernanda Duque.
Los niños aprenden a hacer artesanías y se divierten.
La vereda Samaria adentro del río Samaná.
El uso de este sitio web implica la aceptación de los Términos y Condiciones y Políticas de privacidad de LA PATRIA S.A.
Todos los Derechos Reservados D.R.A. Prohibida su reproducción total o parcial, así como su traducción a cualquier idioma sin la autorización escrita de su titular. Reproduction in whole or in part, or translation without written permission is prohibited. All rights reserved 2015