
Para finales de este mes, hacia el 25 de septiembre, dejará su cargo el gerente del Aeropuerto del Café (Aerocafé), Luis Fernando Mejía Gómez, luego de renunciar ante el gobernador de Caldas, Julián Gutiérrez y el alcalde de Manizales, Jorge Eduardo Rojas.
Su decisión ocurre luego de aceptar el ofrecimiento que le hizo el vicepresidente de la República, Germán Vargas Lleras, para asumir la nueva Dirección de Infraestructura de la Vicepresidencia, y después de haber rechazado dos propuestas similares del actual Gobierno.
Como la tercera es la vencida, asegura que no podía dejar pasar una oportunidad, con la que siempre soñó, teniendo en cuenta además el honor de que lo tuvieran en cuenta.
Pese a su retiro, el dirigente asegura que lo más importante es que persista la integración regional alrededor de este proyecto, y que desde su cargo seguirá haciendo fuerza por él.
El proyecto
- ¿Cómo deja el proyecto y cómo ve la situación, en especial por la promesa de unos recursos que no han llegado?
El proyecto tiene una fortaleza muy grande y es haber logrado su afianzamiento técnico pleno, tanto en sus obras civiles, como de operación aeronáutica, para sus dos primeras etapas. Eso se debe seguir mostrando y haciendo valer. Lo otro, es que se ha recuperado confianza ante el Gobierno Nacional. Indudablemente queda mucho por hacer, y estoy seguro de que quien venga mejorará muchas cosas, pero lo más importante es que la región trabaje unida con el Gobierno para concretar la terminación de la primera etapa.
- Lo más preocupante es la plata, qué pasó con la promesa del Gobierno de entregar unos $50 mil millones iniciales, de una partida total de $300 mil millones?
Infortunadamente a la fecha no se ha podido concretar la entrega de nuevos recursos, pues es claro el mensaje que hemos recibido sobre las dificultades fiscales de la Nación. Es sabido que el Presupuesto General tiene algunas restricciones y prioridades para la ejecución de obras de infraestructura. La tarea es lograr que con la unión de todos se continúe con la construcción del aeropuerto y para eso es necesario firmar pronto un convenio interadministrativo con la Aerocivil.
- ¿Y con la plata de las vigencias pasadas, unos $20 mil millones, qué avance hay?
Creo que se reduce a lo mismo, el Gobierno no ha podido avanzar en los primeros $10 mil millones, que parecería lo más sencillo, en la medida en que no ha podido definir fuentes de financiación para todo el proyecto. Lo más importante es trabajar para que pronto haya recursos para reiniciar las obras, y seguir trabajando e identificando nuevas fuentes de la Nación.
- Hay entonces una nueva incertidumbre en el aeropuerto, porque si no llegan esos recursos...
Lo importante es que la región trabaje unida para que, en medio de las dificultades financieras, aparezcan unos recursos de la Nación para la primera etapa. La dificultad del Aeropuerto está en la forma en que podrían ser entregados los recursos, pues a lo mejor ya no se entreguen en tres vigencias de $133 mil millones cada una, como pensamos, sino que eventualmente se extiendan a unas cuatro. Dependerá mucho de la capacidad fiscal del país.
Compromiso del Gobierno
- En diciembre próximo se cumplen dos años sin avanzar en las obras principales, ¿eso no es una gran preocupación?
Por supuesto. El proyecto se suspendió en su momento, en atención a la orden de la Aeronáutica Civil de no continuar hasta cumplir dos requisitos. Uno, terminar los estudios y diseños de afianzamiento técnico, los cuales efectivamente se entregaron satisfactoriamente en agosto del 2013. El otro era un pronunciamiento público del Gobierno de que aportaría los recursos para la etapa uno. Estas dos cosas se cumplieron el 3 de octubre del 2013. Desafortunadamente, no pudimos avanzar porque la dirección de entonces de la Aerocivil consideró necesario un documento Conpes que validara las inversiones nuevas. Como Asociación dijimos que no era necesario porque el Conpes que estaba vigente tenía recursos para poder invertir en obras, mientras se hacia la nueva estructuración y el cierre financiero final. Pero infortunadamente no hubo forma de convencerlos.
- Si la región ya cumplió, lo que se espera ahora es que el Gobierno cumpla con su palabra...
Creo que de parte del Gobierno Nacional hay plena disposición de cumplir. La exministra de Transporte, la actual ministra, Planeación Nacional y el viceministro de Infraestructura han resaltado ese compromiso. El Gobierno no lo ha desconocido. lo que ha dicho es: tengo dificultades para cumplirlo.
¿Ha habido alguna propuesta?
Hemos dicho que la plata no se necesita toda de una vez. Se trata de acompasar esas dos situaciones, y se me ocurre que mientras tanto se firme un convenio con los $9 mil 800 millones que están disponibles de vigencias pasadas. Luego se van identificando nuevas fuentes de financiación de la Nación para poder continuar en los próximos años.
- ¿Y los recursos para garantizar por lo menos el mantenimiento de las obras que ya se han construido?
Toda la preservación de las inversiones se ha hecho con recursos de la región. Entre otras, hago un homenaje al consejo directivo de la asociación Aeropuerto del Café, porque desde nuestra llegada aceptó esa recomendación, de no dejarlas expuestas, sin obras de protección, de mitigación de riesgos y de mantenimiento. A mi juicio, es una actividad que se debe mantener. En principio, lo ideal sería que con los recursos asignados por el Gobierno Nacional se hicieran esos mantenimientos, pero va a depender mucho de la oportunidad en que se entreguen los recursos.
- ¿Qué pasó con el plan B, caso las famosas APP (Alianzas Público Privadas)?
La primera etapa no tiene posibilidades de ser desarrollada por una APP, entre otras, porque se trataría de una APP de iniciativa pública, porque el proyecto ya está en construcción y tiene los diseños. La etapa uno, es de un volumen de pasajeros que limita la posibilidad de que un privado recupere pronto su inversión. Eso es inviable desde el punto de vista financiero.
Desde el Viceministerio
¿Desde el nuevo cargo espera seguir velando por este proyecto?
Aunque en mi condición de exgerente del Aeropuerto tengo una inhabilidad específica, sí tengo claro que no quedo inhabilitado como caldense y manizaleño, el vicepresidente lo sabe, y aunque hay que trabajar por la causa nacional, obviamente seguiré teniendo muy en cuenta la región.
- ¿Más ligero de peso al entregar este cargo?
Estoy muy contento con el ofrecimiento que me hizo el vicepresidente y espero hacer honor a esa confianza, pero desde mi nuevo cargo estaré atento al desarrollo del proyecto.
- ¿Ha sido el trabajo más duro que ha tenido?
Ha sido un trabajo muy interesante, un gran reto, muy gratificante, la Asociación tiene por ejemplo una gran fortaleza en su gente, en el equipo de trabajo, y creo que esas personas tienen un conocimiento muy grande, que no se debería perder.
- ¿Pero sí es el que más lo ha trasnochado?
Ha sido un proyecto complejo.
- ¿Usted aspira volar por Aerocafé?
Claro, estoy convencido de eso, ese no es un deber, es un imperativo de todos nosotros.
- ¿No es un poco irresponsable dejar el aeropuerto, justo en este momento?
No lo es, ha habida cuenta de que nuestra gestión siempre estuvo realizada a través de un equipo de trabajo, el cual considero muy competente y comprometido. Siempre trabajamos bajo la premisa de un equipo unido, en procura del objetivo propuesto y de una sola persona al frente del proyecto.
El uso de este sitio web implica la aceptación de los Términos y Condiciones y Políticas de privacidad de LA PATRIA S.A.
Todos los Derechos Reservados D.R.A. Prohibida su reproducción total o parcial, así como su traducción a cualquier idioma sin la autorización escrita de su titular. Reproduction in whole or in part, or translation without written permission is prohibited. All rights reserved 2015