Discurso del caldense del año: El compromiso es continuar generando el mayor empleo

LA PATRIA | Manizales

1

Evocando a nuestro ilustre escritor, García Márquez, muchos años después frente a la vida habría de recordar y agradecer a las instituciones en las cuales tuve mi formación académica. Hice mi primaria en la Escuela José María Restrepo Maya, ubicada en ese entonces en el barrio San Antonio de Manizales donde nos sentábamos cinco estudiantes en una banca larga de madera y solo con un lápiz y un cuaderno de 20 hojas, todos de pantalón corto (recuerdo el frío).

Allí aprendimos a leer y a escribir y tuve la oportunidad de tomar leche, comer queso y pan, gracias a un programa alimenticio que tenía el gobierno en esa época. Estoy muy agradecido, pues me enseñaron las primeras letras y como si fuera poco nos daban comida (todo gratis).

Continué mis estudios de bachillerato en el Instituto Manizales, cuya sede era una casa grande, vieja y destartalada ubicada en el barrio los Agustinos de Manizales; donde a pesar de la vetustez en su interior todo era joven y alegre, pues los estudiantes disfrutábamos de nuestros mejores años y amábamos mucho nuestro colegio, el nivel académico, la calidad de nuestros profesores y la educación recibida fueron de lo mejor.

2

Tengo los mejores recuerdos de esta institución en especial las famosas semanas culturales. Posteriormente realicé mis estudios universitarios (Economía) en la Universidad Cooperativa, hoy Universidad de Manizales. La carrera universitaria la cursé en horario nocturno, pues en el día tenía que trabajar para sostenerme. La Universidad ha crecido mucho desde entonces, como se lo ha merecido por su calidad académica. Allí adquirí los conocimientos académicos y contables que me serían de mucha utilidad en mi vida profesional.

En 1990 tomé la decisión de establecerme en la finca (una parcela de 7 cuadras que le legó a mi madre mi abuelo materno, Manuel Castaño), situada en la vereda Los Cuervos, de Villamaría, finca La Guamera, lugar donde se inició la gran aventura de lo que es hoy La Meseta S.A.

Tenía grandes cosas a mi favor: mi padre y mi hermano Fernando ya vivían y trabajaban ahí. Yo no tenía un solo peso, estaba joven, libre y aliviado y vi a la tierra como mi socia, que no deja de trabajar las 24 horas todos los días y nos ofrece ese maravilloso producto como lo es el café, es decir estaban dadas las condiciones para empezar a trabajar.

Deseo agradecer a todos mis allegados y vinculados, así como a mis colegas cafeteros y a las instituciones cafeteras, las manifestaciones de alegría y regocijo que he recibido a raíz de este reconocimiento (Caldense del Año 2020).

3

Agradecer a mi familia padres y hermanos que me han acompañado y han trabajado a mi lado denodádamente y sin miramientos a través de todos estos años, pues La Meseta S.A. es una empresa familiar y yo me debo al gremio como a mi familia, ya que la familia es la primera empresa que tenemos.

Agradecimiento especial a mi querido municipio, Chinchiná, donde fui adoptado y le he correspondido a la altura de su cariño y acogimiento. Vale la pena destacar que fue en este municipio donde creció y se consolidó La Meseta S.A., de la mano de una clase trabajadora, laboriosa, honesta, agradecida y con sentido de pertenencia como son los chinchinenses.

Hago un llamado muy especial a la clase empresarial para que coloque sus ojos y sus inversiones en este bello municipio, como lo hizo don Héctor Mejía cabeza del grupo Arme y, como en mi propio caso, fue de las mejores decisiones que hemos tomado y los resultados son la prueba de ello.

No puedo dejar pasar por alto los 100 años de nuestro querido diario LA PATRIA. Una cosa que puedo decir es que han sido 100 años donde miramos y nos miran todos los días y entre más años pasan más nos enamoramos. Al diario LA PATRIA y a todos sus lectores, muchas felicitaciones.

4

Un deleite diarios y de las primeras cosas que se hacen cada día es leer el diario LA PATRIA, acompañado de una deliciosa taza de café, situación que se seguirá presentando en los 100 años venideros, así que debemos estar a la altura de esta sana y agradable costumbre

La condición actual del país debemos entenderla y tener conciencia de que no debe ser nuestro destino final. La desafortunada coyuntura que se vivió con el paro es algo inaudito e insólito, no nos merecemos esta circunstancia y todo el daño que nos hagamos ahora se va a reflejar en un futuro inmediato.

Nuestro compromiso en La Meseta S.A. es continuar generando el mayor empleo posible de calidad y creer y apoyar demasiado nuestra región y nuestro país, así como lo ha hecho nuestro presidente, Iván Duque. Le apostamos todo a ello y no bajaremos la guardia, al contrario, seremos parte activa de una reconciliación para tratar de encontrar el sendero de la armonía y la paz a través del trabajo honesto y laborioso, que es como lo deseamos la gran mayoría de los colombianos.

¡Muchas gracias!