Colombiana se canjea por su esposo secuestrado por un grupo guerrillero

Una colombiana de 32 años se canjeó por su esposo, que estuvo secuestrado durante 117 días por un grupo guerrillero en las espesas selvas del Chocó, fronterizo con Panamá, debido a sus problemas de salud.

Manuel Montes Echavarría, de 43 años, relató al programa "Voces del Secuestro" de Caracol Radio, dirigido por el periodista Herbin Hoyos, que su esposa, Nohora Isabel Precigas, ocupó su lugar hace tres días para salvarle la vida.

El exsecuestrado dijo que cuando se produjo el canje no pudo ver a su esposa.

Según Montes, su secuestro ocurrió el pasado 18 de agosto cuando se movilizaba en una lancha por el río Atrato, en cercanías de Quidbó, la capital del Chocó, por un grupo guerrillero cuyo nombre no dio.

Con la voz entrecortada, Montes dijo que "es un dolor muy grande. Yo no tengo palabras como explicar esto que nos está pasando".

Montes le pidió al presidente colombiano, Juan Manuel Santos, que "haga el negocio de la paz" con los que están al margen de la ley y "traiga esa paz que todos necesitamos".

El exsecuestrado dijo que durante su cautiverio le suministraron las medicinas para tratar los problemas de salud que lo aquejan.

Agregó que desde que recuperó la libertad, el pasado jueves, él y su familia no han podido dormir a la espera de Nohora.

"Aquí estamos todos, hemos estado en vigilia desde hace dos días", indicó Montes, quien señaló que su hijo de cuatro años no sabe la suerte de su mamá.

Detalló que durante su secuestro no pudo escuchar ninguno de los mensajes que le enviaba su esposa porque el sueño lo vencía en horas de la madrugada.

Montes espera que antes de finalizar el año se acabe el secuestro de su esposa, a la que en todo caso le envió un "mensaje de aliento, de fuerza" "La amo con toda mi alma y que estoy haciendo todo lo posible (para su liberación)", expresó.

Relató también que en la misma zona y por la misma época en la que él fue secuestrado, también ocurrió lo mismo con otro hombre llamado Patrocinio Sánchez, "del que no se sabe nada".