Una vida entre la familia, el teatro y la televisión

Valeria Villegas
LA PATRIA | MANIZALES

El actor y docente Julio Sánchez Cóccaro visitó a Manizales para dictar el taller Vamos a contar verdades a jóvenes de las casas de la cultura, estudiantes de artes escénicas y personas encaminadas a la actuación. El encuentro permitió a los asistentes obtener herramientas para entenderse a sí mismos y entender a los demás a partir de la verdad.
El artista llegó en compañía de sus dos hijos, Adrián y Variel, quienes lo apoyaron en el ejercicio que realizó con los participantes que consistía en crear una verdad en su interior, para que la gente piense que es real, a partir de una mentira, que es la historia. Así fue como, durante el fin de semana, el taller cumplió con sus propósitos: formar segundo a segundo a partir de lo práctico y sorprenderse con lo que pudieron descubrir.

- ¿Cómo ha sido su vida en los últimos años?
He trabajado en los proyectos Mamá también y La fiesta del Chivo, para televisión. En nuestra misión familiar estamos trabajando con De crisálida a mariposa que es el taller con el que venimos a Manizales. Aparte tenemos un negocio de comida que se llama el Capital Chorizo, que va por los pueblos cercanos a Bogotá llevando comida gourmet rápida, y lo más importante es que atiende el propietario (risas).

- ¿Cómo empezó en el teatro?
Empecé haciendo televisión porque mi papá era actor. Un día me encontré con el teatro por el 'Gordo' Benjumea, y empecé ha hacer comedia en La Casa del Gordo. Después estudié pedagogía, producción, vainas que me ayudaron para cumplir mi misión.

- ¿Qué significa para su vida el teatro?
El teatro hace una parte importante y fundamental en mi vida, porque es el contacto directo con el público. Hay un género que es el más difícil, el que más me gusta y es el que me da más nervios cuando salgo a escena, se llama el stand comedy. Es muy complicado porque tiene unos estándares de risa de cada ocho segundos y si el público no se ha cautivado uno empieza a angustiarse.

- ¿Qué es lo más difícil de la televisión?
La televisión es otro ejercicio igual de válido donde tienes que resolver cosas mucho más rápido que en el teatro. El director da una indicación y en ese momento tienes que solucionarlo, mientras que en el teatro lo puedes hacer en tres meses o en el cine tienes todo el día.

- ¿Qué le deja más, el teatro o la televisión?
Irreductiblemente la televisión deja mucho más, con ella tu te puedes mantener, aunque no... porque la televisión tiene unos baches muy largos, y el teatro lo que tiene es que es más constante, así no ganes tanto. No es que el uno supere al otro, lo ideal es la combinación entre los dos.

- ¿Por cuál se inclina más?
A mi me encantan los dos, hay épocas en que estoy haciendo televisión y me hace una falta terrible el teatro, y empiezo a tratar de escribir cosas, y la televisión es lo que más disfruto en la vida. El día que me angustie en una serie renuncio, porque la idea es pasarla bien y se feliz en lo que uno hace.

- ¿Cómo es su experiencia de enseñar teatro?
Mi esposa que es la que organiza estos talleres, estudió pedagogía igual que yo, y alguna vez decidimos que teníamos que enseñarle a la gente lo que sabíamos, entonces empezamos enseñándole a un pueblo, luego estuve en Protagonistas de novela y fue algo que funcionó muy bien porque vieron otro estilo de maestro. Soy un profesor netamente emocional. Cuando llegué de Protagonistas le dije a mi esposa, quiero dedicarme a esto, a enseñarle a la gente, a transmitir y sentir sus emociones, a conocerse por dentro y a descubrirse sus demonios.

- ¿Con qué mensaje quiere que se queden las personas que asisten a sus talleres?
Yo quiero que se queden con un mensaje de vida y es pensar que la verdad cada uno tiene que aceptarla. Uno tiene que reconocerse, tiene que alimentarse y aceptar a los demás como son.

- ¿De que se trata la empresa familiar?
Somos los cinco, mis dos hijos, mi hija y mi esposa. Esto arrancó hace 15 años y la empresa es la familia. Somos capacitadores y formadores de emociones. Trabajamos con las empresas y diseñamos talleres para cumplir cada objetivo. Adrian maneja la parte técnica, Variel es el facilitador de movimiento y de clown, la niña maneja la parte de estéticas del taller y mi esposa es la coordinadora y hace la logística.