El buey y la mula siguen en los pesebres

Luz Dary Duque lleva 13 años desarmando el bifé donde guarda la vajilla, copas y bandejas para hacer su pesebre. Desde noviembre comienza a desocupar la estantería del mueble para empezar a adecuar el lugar donde nacerá el Niño Dios. Vuelan bisagras, tornillos y puertas para darle paso a la Virgen María, San José, ovejas, pastores y la mula y el buey, a pesar de que el papa Benedicto XVI, en su libro La infancia de Jesús, señala que en el Evangelio no se habla de estos dos últimos animales.

"A mí me criaron con la mula y el buey en el pesebre y por tradición los seguiré ubicando al lado de la Virgen María, José y el Niño Dios", sentencia.

Ella vive en el conjunto cerrado Piamonte y su pesebre es muy visitado por amigos y vecinos, por lo que se siente orgullosa al exhibirlo y agradecida con el público que llega a su apartamento. En la parte superior está el desierto, mientras que en la mitad, Belén, y abajo, una villa con nieve simulando el espacio por donde pasará Papá Noel.

Cecilia Arango también sigue con la tradición de la mula y el buey. Es más, la mayoría de imágenes tiene una tradición de 50 años que fueron elaboradas por su mamá, Carmen Emilia Marín. Quien lo visita lo puede comparar con las montañas del Paisaje Cultural Cafetero y con la gesta de la colonización antioqueña. Hay figuras de arrieros con sus mulas, casas artesanales, iglesia y fincas. Según ella, cada quien tiene derecho a explorar su creatividad y disfrutar de la elaboración de su pesebre.

En la parroquia de Nuestra Señora del Sagrado Corazón de Jesús, en Palermo, también conservan al buey y la mula y así mismo lo seguirá haciendo el párroco Orlando Hoyos, del Santuario Nuestra Señora de Fátima, quien el pasado viernes apenas estaba sacando las imágenes y el papel encerado. Él explica que el papa señala que en el Evangelio no se habla de animales en el lugar donde nació Jesús, pero tratándose de un pesebre, el lugar donde comen los animales, la iconografía cristiana captó muy pronto ese motivo y adoptó como costumbre la representación del portal de Belén con el buey y la mula.

"Lo importante es que estén la Virgen María y San José. El resto son accesorios. Los periodistas se pegaron de ese concepto del papa para volver noticia algo que no es. Acá, por ejemplo, utilizamos imágenes de grupos y personajes contemporáneos para acercar más a los fieles", concluyó el sacerdote.

¿Mantiene las figuras del buey y la mula en su pesebre?
Fabiola Vásquez, Palermo
Ahí los tengo, sigo con la tradición, aunque no debería ser así porque se debe seguir lo que dice el papa.

Miriam Arias, Fátima
Sí. Es que los medios de comunicación tergiversaron lo que dijo el papa. Él nunca manifestó que no se pudieran ubicar estos animales en el pesebre.

Paola Jiménez, Villamaría
Aún se conservan los animales por tradición y costumbre familiar.

Judith Marín, El Bosque
Me es indiferente porque no hago pesebre, nunca me inculcaron esa tradición.

José Blandón, Neira
La tradición es tenerlos en el pesebre como nos acostumbramos a elaborarlo.