10 portadas históricas de la música colombiana

Los asistentes a la biblioteca Orlando Sierra Hernández, ubicada en las instalaciones del colegio Inem, se encuentran esta semana con 10 paneles de la exposición Nos vemos las carátulas, volumen 1, de la Fonoteca de Señal Memoria.
Es una muestra de en un período histórico como es la franja de existencia del LP en Colombia. Aunque el primer vinilo prensado en el país es de 1957, en la colección la carátula más antigua es Recuerdos inolvidables de Carlos Julio Ramírez de 1959. La última carátula es La Tierra del Olvido de Carlos Vives de 1995, época en la que se dejaron de producir vinilos en Colombia.
Andrés Ospina, Miguel Ángel Rodríguez y Jaime Andrés Monsalve hicieron la curaduría a partir de la colección musical de la Fonoteca. Las carátulas fueron elegidas por el valor histórico de cada disco. Bovea y sus vallenatos, por ejemplo, fue de los primeros discos que logró vender miles de copias en el país. También aparecen carátulas simpáticas que despiertan recuerdos importantes como las de Los Tolimenses y Los Graduados.
En este recorrido por la música popular colombiana, se pasa por la balada, la salsa, el vallenato, la música del Caribe y del Sur del país, la chirimía, el rock en español, las nuevas tendencias del vallenato e incluso algunas carátulas de música clásica que cuentan con la participación de importantes músicos colombianos, como Rafael Puyana.

Visitas

Para los interesados en visitarla, el horario de atención al público es hasta mañana de 7:30 a.m. a 12:00 m. y de 1:30 p.m. a 6:00 p.m., mientras que el viernes, día que finaliza la exposición, es de 7:30 a.m. a 12:00 m. y de 1:30 p.m. a 5:00 p.m.

Fotos | Freddy Arango | LA PATRIA
Julio Ernesto Estrada creó en 1970 Fruko y sus Tesos, catapulta de músicos como Joe Arroyo, Wilson Saoko y Piper Pimienta Díaz. Ayunando incluye canciones como Yo soy el punto cubano, Mosaico santero y El ausente.

Binomio de Oro, agrupación pionera del vallenato romántico, nació en 1976 por iniciativa del acordeonero Israel Romero y el cantante Rafael Orozco. En esta producción se encuentran sones y paseos famosos como Sombra perdida, Muere una flor y Juramento.

Leonor González Mina cantó por primera vez ante un auditorio en París, cuando hacía parte del cuerpo de bailarines del Ballet Folclórico de Delia y Manuel Zapata Olivella. Ellos la instaron a cantar para quemar tiempo entre cuadros, y en lo sucesivo no abandonaría ese arte, que la llevó en la década del 70 por varios países.

Óscar Isaac Goldenberg, nació en Calarcá (Quindío), pero desde su infancia se radicó en Cali. Inició su carrera en Bogotá en el programa radial El show de los frenéticos e hizo parte del reconocido Estudio 15. Su acto, influido por los cantantes pop norteamericanos y mexicanos como Paul Anka y Enrique Guzmán, le confirió un lugar prominente entre los ídolos de la juventud de los 60.