ANDRÉS RODELO
LA PATRIA | MANIZALES
En agosto disminuyen las lluvias, cuenta Cristian Euscátegui, jefe del Servicio de Pronósticos y Alertas del Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam), lo que conlleva que haya días calurosos, sin que falten los lluviosos.
"De 3 días, 2 llueve y uno no. También es probable que uno sea lluvioso y 2 no. El tránsito de ondas tropicales también influye en este fenómeno", dice Euscátegui. La prueba son los días recientes en Manizales, marcados por momentos de calor y de frío.
Estos cambios abruptos aumentan el riesgo de contraer enfermedades respiratorias y en la piel. LA PATRIA consultó a dos especialistas, quienes dieron recomendaciones para estar saludable.
Cuide la piel
Olga Lucía Forero, dermatóloga de Radiante Clínica de Dermatología, aconseja:
- Aplicarse bloqueador solar todos los días. Muchos lo utilizan dependiendo de si hace calor o no en la mañana. El clima varía mucho, porque luego puede salir sol y quedar expuesto. Aunque visiblemente no haya luz del sol, de todas formas la radiación sigue presente, al igual que la de los aparatos electrónicos.
- Si la persona tiene piel sensible y sufre dermatitis atópica debe hidratarse la piel con sustancias que no tengan conservantes y colorantes.
- Darse un baño no muy largo con agua tibia, en la noche, si fue un día caluroso y si la persona sudó mucho. Secarse suavemente, dejarse un poco de agua sobre la piel y aplicarse crema humectante para estar protegido.
- Los cambios climáticos empeoran enfermedades como la rosácea, que provoca piel rojiza y, frecuentemente, protuberancias pequeñas y llenas de pus en el rostro. Estos casos no son fáciles de tratar, porque la persona debe tomar medicamentos que estabilicen la piel. Se aconseja visitar a un especialista.
- Hay niños que son sensibles al calor y sufren afecciones como la miliaria, que se caracteriza por la obstrucción de los conductos sudoríparos que ocasionan que el sudor quede atrapado debajo de la piel. Para evitarlo, hay que mantenerlos frescos.
- Abrigar a los niños cuando hace frío, pero no ponerles prendas con lana ni sintéticas, porque pueden causarles alergias y favorecen el crecimiento de bacterias que afectan la piel. Es mejor la ropa en algodón.
- El frío reseca la piel. Se recomienda utilizar humectante.
El correcto
"Los bloqueadores solares deben tener un grado de protección mayor a 30. Los principios activos dependen de la piel. Para jóvenes y adolescentes se aconsejan antisolares en gel y loción, pues son libres de grasa. Para los adultos, los que son a base de crema con el fin de hidratar la piel", indica Olga Lucía Forero, dermatóloga de Radiante Clínica de Dermatología.
Ojo con la respiración
Álvaro Augusto Zuluaga, especialista en rehabilitación cardiopulmonar sugiere:
- Evitar los cambios bruscos de temperatura. Por ejemplo, alguien está en un recinto cerrado y sale al exterior, en donde cae una llovizna o hace sereno. La humedad aumenta la presencia de ácaros, virus y otros microorganismos en el aire, lo que puede provocar la gripa.
- Los niños son sensibles a lo anterior y pueden generar una cadena de contagio. Los llevan al jardín, en donde pasan el virus a otros niños, estos a sus padres y los últimos a los compañeros de la oficina. De allí la importancia de cuidarlos.
- Salir cubierto, utilizar chaqueta y bufanda. Agregar un pasamontañas en el caso de los niños.
- No poner muchas prendas al niño. Hay madres que los visten con una camisa, saco y chaqueta. Es exagerado y atenta contra la salud, pues al quitarles la ropa ocurre un cambio brusco de temperatura que puede enfermarlos.
- Quitarse la ropa luego de mojarse por la lluvia. Hacer lo contrario aumenta el riesgo de contraer enfermedades respiratorias.
- Cargar siempre chaqueta, no confiarse de que el día amaneció soleado.
- Utilizar tapabocas cuando hay fuertes emisiones de ceniza del Volcán Nevado del Ruiz. En Manizales siempre cae ceniza, de allí que sea importante asearse la nariz y tomar abundante líquido para purificar las secreciones.
En caso de gripa
Álvaro Augusto Zuluaga, especialista en rehabilitación cardiopulmonar recomienda:
1. Mucho líquido y vitamina C.
2. Inhalaciones con remolacha y eucalipto, pues tienen dos funciones: el eucalipto sirve como broncodilatador y es un antiséptico que disminuye los virus y las bacterias. La remolacha desinflama.
3. Cubrir las orejas y los pies de los niños, partes que funcionan como el termostato del cuerpo.
4. Infusión de agua de panela con limón y jengibre.
5. Preparar una bebida de agua de panela con un mango maduro pequeño sin pepa y sin cáscara, cristal de sábila, cebolla de huevo, limón, miel de abejas y rábano. Se hierve, se licúa y se toma una cucharada cada dos horas por cinco días. Si es un niño, una cucharada dulcera. Si la persona es diabética, no utilice agua de panela ni miel sino agua y estevia.
6. Ir al médico cuando el proceso es infeccioso.
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