Isabel Vallejo | LA PATRIA
La higiene y el estilo propios son conceptos íntimos que van relacionados de manera directa con la presentación personal. Una convergencia de hábitos, usos y modas que se traducen en cómo me veo y me ven los demás. De lo impecable que luzca su uniforme, por ejemplo, se podría deducir si es ordenado y responsable o todo lo contrario. Lo mismo ocurriría con su cabello (limpio, sucio, peinado, enmarañado), sus uñas, sus medias y hasta su morral.
Noelba Calle, psicóloga, señala cada uno de estos detalles, pero resalta que la postura corporal, comer con modales y dirigirse a los demás con cordialidad también suman a esa presentación. “Hay que poner en práctica la Urbanidad de Carreño, que hoy se enseña en las instituciones educativas a través de las competencias ciudadanas. Hay aptitudes y actitudes que dicen mucho de cada joven y, por supuesto, de su familia”, explicó la profesional.
Importante para ellos
Para Manuela Ramírez, estudiante de décimo del colegio Perpetuo Socorro, la feminidad es muy importante. De ahí que la exteriorice con su uniforme bien llevado, su cabello limpio y bien cepillado, además de un sutil maquillaje y el uso de loción. “No es que sea pinchada, pero no me aguanto el pelo grasoso de otras personas y los malos olores, por qué no trabajar contra eso. No estoy segura de que uno sea por dentro como es por fuera, pero arreglarse y quererse sube los ánimos”, indica.
Algo similar piensa Alejandro Calderón, del Redentorista, quien recalca que el aseo es fundamental. “Puede suceder que uno sude en educación física y que eso se convierta en mal olor en las axilas, así que hay que actuar, llevar siempre desodorante. Uno puede llegar al colegio bien arreglado y salir sucio. Eso no quiere decir que uno sea desordenado. Las primeras impresiones a veces no son lo que parecen”, expresó.
María Angélica García, docente del Eugenio Pacelli, aseguró que para los muchachos es muy importante verse bien. “Todos se preocupan a su modo. Usan los cabellos paraditos y eso está bien para su momento, lo que pasa es que uno lo ve raro. Lo mismo sucede con detalles del uniforme. En ese sentido los colegios tienen reglas, aunque hay aspectos que van de la mano con el libre desarrollo de su personalidad”, dijo.
LA PATRIA les preguntó a nueve chicos qué piensan sobre la presentación personal (Ver info principal).
No se deje llevar
La psicóloga Noelba Calle insiste en que es legal y moral el libre desarrollo de la personalidad, aunque aconseja a los adolescentes no intervenirse el cuerpo (tatuajes –piercing) ni usar maquillaje en exceso: “Que tengan tiempo de pensar si eso es lo que quieren o no. Es importante resaltar que una cosa es el aseo y otra el peinado. Cuídese y esté a la moda, pero no se descuide”.
Para pensar*
Seguro alguna vez se ha topado con un hombre o mujer elegante, con buen gusto y que, sin embargo, al conversar con él, lo decepciona. La imagen personal va mucho más allá de lo que se ve a simple vista. Es un conjunto de cualidades que se transmite a través de la imagen externa, la expresión y la actitud.
- No se preocupe solo por vestirse sino por cómo vestirse.
- La imagen personal no la consigue imitando a nadie.
- Su forma de expresarse, actitudes y aptitudes también lo definen.
- Conózcase a sí mismo y sepa qué imagen transmite a los demás. Tome conciencia de eso.
*Tomado del blog personalshopper.es
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