Las criptomonedas están cobrando mayor relevancia en la industria del entretenimiento digital

Como métodos de pago, las criptomonedas han ganado rápidamente terreno entre los usuarios al ofrecer una experiencia más segura y puntual a la hora de realizar cualquier transacción. Gracias a sus atributos, estos activos digitales han llegado a convertirse en un mercado creciente y diferenciado que está empezando a ser explorado por las empresas del entretenimiento, permitiendo la captación de nuevos clientes gracias a sus innovadoras propuestas.

Un método discreto y efectivo

Uno de estos ejemplos es el proyecto Mean DAO, el cual permitirá a los usuarios pagar solamente por los consumos realizados en sus servicios de suscripción como Netflix, Hulu y Amazon Prime. Al utilizar los analíticos de estas plataformas, se puede medir al segundo las horas visualizadas por los usuarios para efectuar los cobros, permitiéndoles ser facturados de acuerdo al uso real que estos les den.

En el sector del casino en línea, operadores como MetaSpins casino online aprovechan el atractivo y seguridad de las criptomonedas para ofrecer a sus usuarios su amplio catálogo de juegos, entre repartidor en vivo, mesas de blackjack y ruleta, al igual que cientos de tragamonedas. De esta forma, los jugadores pueden efectuar pagos y retiros en las redes de Bitcoin, Etherium, Dogecoin o Cardano con plena confianza de que sus datos financieros estarán a buen resguardo.

El estudio Square-Enix, creador de la popular saga Final Fantasy, también ha visto el potencial de las criptomonedas para los videojuegos. La desarrolladora ha apoyado económicamente a la startup Zebedee, que busca crear un ecosistema de pagos entre jugadores y las casas de software, así como implementar un sistema de propinas en bitcoins con el que los usuarios premiarán a sus creadores de contenido favoritos.

La descentralización es la clave

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Mientras que, en los métodos de pagos tradicionales, el alojamiento de los fondos y la aprobación de las transacciones depende de una tercera entidad, como lo sería un banco, las criptomonedas por su parte, están diseñadas para darle control absoluto a los usuarios sobre estas acciones, a través de las wallets o monederos digitales.

Dichas wallets, utiliza un sistema de claves alfanuméricas públicas y privadas para procesar las entradas y salidas de criptomonedas. Las claves públicas identifican las direcciones de las cuentas de los usuarios, pudiendo ser conocidas al revisar el registro público o ledger donde cada transacción hecha por estas direcciones es asentada. Las claves privadas, en cambio, permiten el acceso a la ubicación de las criptomonedas, representando también, la firma de aprobación para las entradas o salidas de los fondos.

En todo momento, estas claves no revelan la identidad de sus propietarios, e incluso las direcciones públicas pueden ser generadas aleatoriamente, lo cual refuerza el anonimato de sus usuarios. Por otro lado, al tenerse todas las transacciones aprobadas y registradas públicamente en la cadena de bloques, cualquier manipulación puede ser detectada e invalidada, suponiendo un reto muy elevado y costoso para los cibercriminales.

Beneficios de las transacciones cripto

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Como medio de pago, las criptomonedas ofrecen varios beneficios, tanto para usuarios como negocios. Mediante las transacciones en criptomonedas, es posible:

• Realizar pagos directos entre cuentas o usuarios.

• Efectuar operaciones sin límites en la cantidad de dinero.

• No incurrir en cargos extras mayores a la comisión de la propia red cripto.

• Operar sin necesidad de realizar conversiones a otras monedas.

• No depender de intermediarios para poder utilizar los fondos libremente.

• Mantener el anonimato de los involucrados en la transacción.

Así mismo, las criptomonedas poseen mecanismos que permiten su propia autorregulación, sin necesidad de intervenciones o reajustes en su valor, como normalmente ocurre con las divisas de uso corriente.

El halving es quizás el más resaltante de todos. Este sistema disminuye cíclicamente el número de criptomonedas extraíbles al procesar o minar las transacciones, al tiempo que incrementa la dificultad para su extracción. De esta manera, se mantienen la uniformidad de las transacciones, dejando únicamente a los mineros más eficientes procesándolas.

Un futuro promisorio

A medida que el uso de las criptomonedas como método de pago está cada vez más normalizado, pudiéndolas encontrar incluso en redes sociales, la industria del entretenimiento también se ha hecho eco de los beneficios que estas ofrecen, otorgando mayor seguridad y agilidad a las transacciones monetarias, al tiempo que ofrecen una plataforma que permite mejorar la experiencia de sus usuarios.

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