LA PATRIA | MANIZALES
Una pesadilla vivió una doradense, de 13 años, víctima de trata de personas en el departamento de Huila. Las autoridades identificaron a nueve mujeres afectadas: 8 venezolanas y la caldense.
El CTI y la Sijín asestaron un duro golpe a la organización criminal Dignidad, dedicada a captar mujeres para fines delincuenciales relacionados con delitos contra la integridad y la libertad sexual.
Fueron siete capturas. Según se logró determinar, estas personas eran contactadas para trabajar, supuestamente, como meseras en Neiva (Huila), pero al llegar al destino las llevaban a dos establecimientos comerciales donde eran obligadas a prestar servicios sexuales a distintos hombres.
Debían laborar hasta que pagaran los gastos de su transporte hasta la capital del Huila, lo mismo que su sostenimiento.
A los aprehendidos les imputaron los delitos de trata de personas, explotación sexual, concierto para delinquir agravado, secuestro simple y acceso carnal violento. Ninguno aceptó los cargos. Los detenidos son alias Luis, Larry, Blaneskis, Édgar, Laura, Yessica y Katherine.
La investigación arrancó en 2019, tras denuncias de Migración Colombia, sede Neiva. A las mujeres las explotaban desde 2018.
Alias Luis sería el dueño de los establecimientos comerciales a los que eran llevadas las mujeres. Su esposa, Laura, fungía como administradora.
Yessica, Katherine y Blaneskis les daban a conocer a las víctimas las condiciones en las que debían trabajar, además de explicarles que debían sostener relaciones sexuales con clientes a quienes les cobrarían sumas de entre $35 y $50 mil.
También debían ingerir licor con los visitantes haciendo que incurrieran en gastos mayores y por eso ganarían comisión.
Ante la situación de vulnerabilidad y sin dinero, las víctimas se veían obligadas a cumplir con las exigencias de sus captores, mientras completaban el pago mínimo por sus gastos.
A algunas víctimas las mantuvieron encerradas prostituyéndose y en caso de negarse a cumplir las labores o enfermedad, o porque los hombres se fueran sin pagar, las multaban con $50 mil.
Debían pagarla para poder empezar a trabajar tarde o salir a la calle. Larry y Édgar Enrique eran captadores de mujeres, a las que llevaban a Neiva en transporte intermunicipal. También se encargaban de la seguridad de los establecimientos.
*Existen juegos en línea que permiten que los menores interactúen con múltiples personas (hablar y enviar mensajes de texto). A pesar de que estos juegos traen efectos positivos para el desarrollo de habilidades sociales, pueden representar, para los menores de 18 años, riesgos de ser víctimas de situaciones como sexting, grooming y sextorsión.
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