Se enfrentaron policías y jóvenes en San Fernando (Manizales)

La indignación de Blanca Janeth Velez López es notoria. Su casa en el barrio San Fernando fue escenario de una intensa lucha entre jóvenes y policías el pasado martes al mediodía. Indicó que los uniformados ingresaron de forma violenta a su casa, quebraron los vidrios de las ventanas, dañaron cuadros, revolcaron la ropa y se llevaron a cinco personas detenidas.

Ayer periodistas de LA PATRIA y Q'HUBO estuvieron en su casa escuchando su versión y la de numerosos vecinos sobre el combate en que se trenzaron decenas de personas y cerca de 50 uniformados, según la apreciación de los habitantes.

Aún se evidencian los daños en las ventanas. Las personas entregaron además un video hecho con imágenes que aportaron vecinos del barrio. Con este sustentan la denuncia que presentaron los afectados ante la Oficina de Atención Ciudadana de la Policía. También lo harán hoy ante la Personería, según comentaron.

Un herido grave

La pelea con la Policía sería la consecuencia de un enfrentamiento que sostienen jóvenes de San Fernando con el combo de un sector vecino que denominan como La Piel Roja.

Al mediodía del pasado martes resultó herido Cristian David Ramírez, de 20 años, alias Pícolo. El hecho ocurrió cerca a La Piel Roja. Él ya había sufrido un atentado hace dos años y en esta ocasión, al parecer en estado de embriaguez, quiso enfrentar de nuevo a su agresor, pero salió mal librado.

Al joven le propinaron varias puñaladas, que lo mantienen entre la vida y la muerte, en cuidados intensivos del Hospital de Caldas.

Los amigos de Pícolo al enterarse de lo sucedido subieron hasta La Piel Roja y lo hallaron casi moribundo aún tendido en el piso. Luego llegó la Policía a atender el caso e hizo que los jóvenes de San Fernando volvieran a su territorio.

Según reconocieron las personas que le contaron a este medio los hechos, los muchachos le reclamaron de forma airada y hasta insultante a los uniformados, por no capturar a quienes ellos señalaban como autores del atentado a Ramírez.

Se desató la asonada

Los Policías pidieron refuerzos, pero la airada protesta de la gente de San Fernando fue mayor. Afirman los denunciantes que los uniformados les lanzaron gases lacrimógenos. Varios jóvenes entraron a la casa de Blanca

Janeth para lavarse el rostro y los ojos, afectados con los gases. Ella saca de una bolsa varias vainillas y declara que dos disparos de gases entraron hasta su casa. Otra mujer enseñó un hematoma de unos 10 centímetros de diámetro y asegura que recibió un impacto de gases lacrimógenos.

Pero todo no paró ahí. Dicen que los Policías trataron de ingresar a la casa a la fuerza y dañaron los vidrios. "Antes de que tumbaran la puerta uno de los muchachos se las abrió", relata Janeth.

En el interior se ocultaban cinco jóvenes del barrio, además de las 11 personas que viven en la casa, entre ellas dos niños de 9 meses y dos años, así como una mujer de 81, todos sufrieron los efectos de los gases.

En una habitación detuvieron a los jóvenes y se los llevaron. En el ingreso, anotan los testigos, los uniformados dañaron cuadros y regaron comida. "Hasta se llevaron unas gaseosas", enfatizan. Por otro lado, un joven aprehendido sufrió una herida profunda con los vidrios rotos.

Las pérdidas aún están sin cuantificar. No solo Blanca Janeth exige que le repongan lo que le dañaron, también otras personas que grabaron en celulares y cámaras la asonada dicen que los uniformados se las quitaron y aún no se las devuelven.

Responde la Policía

Ayer fue un día intenso para los denunciantes, pero también para la Policía de Caldas que acudió a atender las quejas de la comunidad.

El comandante de la institución, David Benavides Lozano, le dijo a LA PATRIA que aún no pueden asumir responsabilidades sin investigar los hechos. Sin embargo, resaltó la importancia de lo que harán en adelante y es acercarse a la comunidad para "hacer las paces" y arreglar lo que sea posible.

En este sentido delegó en el Comando del Distrito la primera reunión que tuvo lugar ayer en San Fernando con la principal afectada y vecinos.

Sobre los hechos que desencadenaron la asonada la versión de la institución es que los uniformados acudieron por el reporte de un herido, pero los amigos de este se enardecieron porque no les pareció rápida la atención y la emprendieron contra la Policía.

Agregó el coronel Benavides que en los hechos hubo una notable influencia del consumo de licor. Acepta que lo que ocurrió allí fue una batalla campal y que algunos miembros de la institución también resultaron con lesiones, por lo que también tendrían que responder quienes los agredieron.

El Comandante de la Policía concluyó que esperan solucionar el asunto de tres maneras: primera, el acercamiento con la comunidad; segunda, establecer bien por qué se produjo la situación; y tercera, la investigación disciplinaria a la que haya lugar.

Una mujer muestra una lesión que atribuye al impacto de una vainilla del gas lacrimógeno disparado.

Foto | Captada de video | LA PATRIA
Con cámaras y celulares varias personas de la comunidad grabaron el procedimiento de la Policía en San Fernando.