Rondan dudas por supuesto robo de armas a miembros de la Sijín

LA PATRIA | LA DORADA

Por las calles de La Dorada rondan versiones de que a dos funcionarios de la Sijín de Caldas los drogaron el fin de semana pasado y les hurtaron sus armas de dotación. Mientras una persona cercana a la Policía aseguró que el hecho ocurrió, la autoridad lo niega.

El hospital San Félix de ese municipio dio fe de que atendieron a los uniformados, pero será dentro de dos semanas que Medicina Legal determinará, por lo menos, qué les causó la intoxicación. Sin embargo, no se sabe si las armas de fuego realmente desaparecieron.

La denuncia

Según testigos, los investigadores se movilizaban en un taxi. El domingo pasado encontraron a uno inconciente, en Bucamba. En otro sector no especificado hallaron a su compañero. Supuestamente les hurtaron las pertenencias.

El lugar en donde al parecer ubicaron a un afectado es una conocida zona de tolerancia. Los trasladaron al Hospital San Félix. Los interrogaron, pero dijeron no recordar nada.

La Policía

El coronel Necton Lincoln Borja, comandante de la Policía de Caldas, desmintió la versión. Sostuvo que solo se tuvo conocimiento de que un uniformado sufrió una intoxicación y que no se perdió ningún arma. Esperan resultados para saber qué causó la descompensación que sufrió.

Luis Eduardo Céspedes, gerente del hospital, dijo que el domingo pasado ingresaron a urgencias dos funcionarios de la Sijín buscando atención médica por una intoxicación exógena, es decir, por ingerir alguna sustancia.

"Se les trató. A uno le dieron salida el mismo domingo y a su compañero lo mantuvieron hospitalizado hasta el martes pasado. Ya están en buenas condiciones", expresó.

Sobre las causas de la intoxicación, concluyó que no se sabe a ciencia cierta si fue por consumo de alcohol, algún estupefaciente o escopolamina. Les tomaron muestras y las enviaron a Medicina Legal. Así se podría determinar si alguien les suministró alguna sustancia.

Lo que enfrentarían

Se iniciarían tres procesos investigativos: uno penal, por si se cometió un delito (hurto de arma o arma involucrada en un delito); disciplinario, por si hubo descuido o negligencia en el cuidado de la misma; y uno administrativo, para pagar el bien del Estado.