Por vender licor adulterado debe reparar a la Licorera

LA PATRIA | MANIZALES

A sus 67 años, Cesario Gómez Ocampo asegura que escuchar los malos consejos de un amigo, en medio de su precariedad económica, lo llevó a tomar decisiones de las que hoy se arrepiente.

Según él, en el 2003 guardaba los enseres que le dejó el dueño de un bar. Cuando las autoridades allanaron su casa encontraron unas botellas de licor adulterado, situación que lo puso en aprietos con la justicia.

12 años después una situación similar se repitió y con la detención domiciliaria vino el guayabo moral. Él jura que lo que hizo fue comprar licor sin estampilla en San Andresito y revenderlo.

“Vendía ese licor, por medias, en una tienda de La Galería. Empecé con eso desde diciembre pasado, pero fueron más los problemas que las ganancias”, aseguró.

Gómez Ocampo aseguró que las autoridades lo descubrieron porque la persona que le surtía el licor malo le robó dos medias. Prefirió delatarlo, que devolverlas.

Por esos hechos ilegales, Cesario se siente apenado con la ILC y se comprometió a ganarse la vida sembrando yucas y cogiendo café en una finca de la vereda Bajo Corinto, de Manizales.

Allanamientos y condenas

*La casa de Cesareo la allanaron el 11 de abril de este año.

*Hallaron cinco cajas de Cristal, con 24 botellas vacías. Además, dos botellas del aperitivo El Aguardientero. En un armario, 166 botellas de aguardiente, algunas con líquido. Y dos galones, con capacidad para 5 y 20 litros, con un líquido incoloro similar al aguardiente.

*Lo capturaron y judicializaron. En análisis de laboratorio a 18 muestras, se encontró que cuatro son de bebida alcohólica fraudulenta.

*Hizo preacuerdo con la Fiscalía y el Juzgado Segundo Penal del Circuito de Manizales lo condenó a seis años y tres meses de detención domiciliaria. Tiene permiso para trabajar.

*En el 2003, el Juzgado Sexto Penal del Circuito de Manizales lo condenó a 36 meses de prisión por hechos similares. Sin embargo, le concedieron la suspensión condicional de la pena.

La cifra

$2 millones 400 mil le pidió la ILC a Cesareo, el miércoles, durante el incidente de reparación.

Para reconocer

*Un licor ciento por ciento puro no puede tener impurezas.

*A la hora de comprar el licor exija que la botella esté sellada con todos los requerimientos de seguridad.

*Fíjese en el número que está encima de la tapa de la botella que debe coincidir con el número de la estampilla.

*Si el contenido está dentro de una botella plástica, mire que el fondo del recipiente no tenga ninguna imperfección o agujero.

*Revise las etiquetas, que no sean reutilizadas, que no estén rotas, enmendadas o sucias.