Pesebre no pudo huir más de las autoridades

LA PATRIA | MANIZALES

A Jairo Restrepo Zapata, alias Pesebre, lo capturaron en el 2012 en Cali, considerado como un líder de la banda de Hernando Ríos, Culebro, dedicada al microtráfico y al sicariato en Manizales. Sin embargo, mientras se adelantaba su juicio, lo dejaron en libertad.

En el 2015 terminó el juicio, en el que no hizo presencia debido a que se desconocía su paradero, y en el 2017 se dictó sentencia. Lo declararon culpable por concierto para delinquir agravado con fines de narcotráfico. Sin embargo, el caso llegó al Tribunal Superior de Manizales, que en mayo pasado confirmó la pena de 8 años y 10 meses de prisión.

Hasta el pasado miércoles permaneció prófugo de la justicia, pues funcionarios del grupo de capturas del CTI le seguían el rastro y dieron con su paradero en Caicedonia (Valle). Lo capturaron y lo trasladaron hasta Manizales, en donde quedó a disposición de un juez de ejecución de penas.

¿Quién es Pesebre?

La banda de Culebro quedó al descubierto por medio de la información que brindaron a las autoridades un consumidor de estupefacientes y un hombre que integró la banda durante 14 años.

Pesebre se dedicaba a elaborar un químico para hacer rendir el bazuco y que también denominaban moscorrofio, y a entregar dineros que eran producto de la venta de estupefacientes.

Genaro Arturo Sánchez Bermúdez, exintegrante del bloque paramilitar Cacique Pipintá, testificó durante el juicio. Pero dijo que no conocía a Pesebre y que agentes de la Sijín lo utilizaron para mentir a cambio de incluirlo en Justicia y Paz.

Esto fue objeto de reproches del juez. Le respondió que en su declaración juramentada mencionó a alias Papito (asesinado por sicarios en 2015) y a Pesebre y Culebro, quienes ordenaban homicidios para quedarse con las ollas e incluso asesinaron a Carlos Andrés Rodríguez Villada, Pánico, por ser un soplón de la Sijín y para quitarle el negocio a alias Tilín.