LA PATRIA | MANIZALES
Las actuaciones "torpes, desacertadas y abiertamente equivocadas" de una abogada por poco obligan a una patrullera manizaleña a pagar 21 años y 10 meses de prisión, por intento de homicidio agravado. Así lo comunicó la Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia, el 18 de enero pasado.
El abogado César Augusto López se encargó de representar a la mujer, con el fin de que se realice nuevamente un juicio oral en igualdad de condiciones frente a la Fiscalía. La señalan de intentar asesinar, junto a dos compañeros, a un hombre en Tuluá (Valle del Cauca).
Ataque en estado de indefensión
Durante la Feria de Tuluá, en junio del 2013, los uniformados abordaron a un sujeto para solicitarle sus antecedentes, pero estaba indocumentado.
Lo trasladaron a la Sijín y tenía anotaciones por hurto, pero no órdenes de captura, por lo que lo dejaron libre. Sin embargo, a la salida del sitio, el hombre los insultó, lo subieron a la patrulla y lo llevaron a un cañaduzal. Uno le propinó tres disparos, creyeron que estaba muerto y lo abandonaron.
Pero la víctima fingió, se arrastró hasta la vía y unos policías de un retén cercano lo auxiliaron y lo llevaron a un hospital. Lo intervinieron de urgencia debido a la gravedad de las lesiones. Identificó a los tres uniformados.
En mayo del 2014, José Adolfo Caicedo, quien accionó el arma, y Ómar Andrés Cortés, otro uniformado, llegaron a un preacuerdo con la Fiscalía y les imputaron solo tentativa de homicidio. En el 2016 les concedieron prisión domiciliaria, tras tres años encerrados en la cárcel.
Lo que sigue
La patrullera sigue negando su participación en el hecho. En agosto del 2015 la condenaron, luego del juicio oral que se llevó a cabo entre marzo y mayo de ese año.
En la casación que presentó López salieron a relucir los errores de la abogada que defendió inicialmente a la señalada. El juez aceptó las pruebas del ente acusador, pero rechazó las de la defensa, pues no especificó la pertinencia, conducencia y utilidad en el momento debido. Tampoco realizó el descubrimiento probatorio que exige la ley.
El abogado que representó a la patrullera en juicio sostuvo que su antecesora carecía de preparación jurídica y no contaba con la habilidad necesaria para litigar en el sistema penal acusatorio, lo que puso a la señalada en estado de indefensión. Muestra de eso es que su única prueba fue el testimonio de la procesada.
Eso mismo reconocieron Fiscalía y Procuraduría, suficiente razón para que prosperara la casación por violación al debido proceso.
La Corte Suprema solicitó que el caso regrese al juzgado que lo atendió y se inicié desde la audiencia preparatoria.
La investigarán
La Sala Penal de la Corte solicitó que investiguen disciplinariamente a la abogada que representó en las audiencias iniciales a la patrullera.
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