LA PATRIA | MANIZALES

Siete años se cumplen hoy de la tragedia del barrio Cervantes, en la que un alud de tierra y lodo tumbó 13 casas y se llevó la vida 48 personas. Hubo 10 lesionados.

El dolor de las familias de las víctimas sigue intacto, al tiempo que se cumple con el juicio oral contra los supuestos responsables: Álvaro Andrés Franco Valencia, exgerente de Aguas de Manizales; Diana Lorena Gómez Zuluaga, exsubgerente de Servicio al Cliente y Sebastián Henao Arango, exsubgerente Técnico.

A ellos los señalan de homicidio y lesiones personales culposas. El juicio estaba programado para terminar este viernes, pero todo indica que se irá hasta el otro año. Arrancó el 1º de octubre ante el Juzgado Séptimo Penal del Circuito y se reanudará mañana.

Durante los primeros días del proceso, la Fiscalía expresó que la tragedia fue producto de la negligencia. Se mostraron unas 50 fotografías de cómo la Sijín encontró el sitio luego del derrumbe. En la mayoría de imágenes se evidenciaban tres tubos que quedaron esparcidos en la zona del deslizamiento.

En el juicio ya se han recaudado cerca de 70 testimonios y está semana se continuará con la recepción de testigos técnicos y peritos, especialmente los investigadores de la Universidad Nacional, sede Bogotá, que realizaron el estudio que sirvió de prueba a la Fiscalía.

"Harán simulaciones y resolverán los interrogantes que la comunidad de Cervantes necesita conocer", expresó el abogado de víctimas.

Este proceso no quiere decir que los acusados sean culpables, simplemente que en su contra se adelanta una investigación y será un juez de la República el que decidirá si los condena o los absuelve.

Lo otro

En el campo administrativo, el caso se encuentra en la apelación a la providencia que negó el llamamiento en garantía a Infimanizales. El mes pasado completó un año en el Consejo de Estado, en el despacho del magistrado Guillermo Sánchez Luque.