LA PATRIA | Manizales
Claudia Yaneth Isaza, de 36 años, habitante del barrio Occidente, de Anserma, ayudó a socorrer la humilde vivienda de astilla y bahareque de los hermanos Cardona Álvarez. Allí murió Flor Elisa Cardona Álvarez, de 77 años.
"Cuando llegué, la casa estaba en llamas y le dí una patada a una puerta que estaban intentando abrir unos vecinos", cuenta la vecina. "Al tumbarla, encontré acurrucada en un rincón a Lolita Cardona, la ayudé a salir al igual que a su hermano, José, y me dijeron que su hermana, Flor Elisa, se encontraba durmiendo en la habitación del fondo de la casa. Las llamas habían cogido fuerza y no pudimos hacer nada".
Los hechos ocurrieron el pasado viernes a eso de las 2:00 de la mañana. Insistentemente los vecinos tocaron a la puerta de Isaza para que les ayudara, mientras que otros se ocuparon de llamar al cuerpo de bomberos y la Policía.
Los bomberos se quedaron sin agua suficiente, debido que el hidratante de la carrera sexta no tenía agua. Por eso debieron extender sus mangueras hasta la carrera quinta.
Al controlar el fuego la vivienda quedo inhabitable. El cuerpo calcinado de la anciana fue hallado entre la madera humeante, por lo que lo trasladaron a Medicina Legal. La autopsia se realizó el sábado y los pocos restos serán enterrados en el cementerio San Nicolás de Anserma. Al parecer el humo sofocó a la mujer y no le permitió salir ni recibir ayuda.
Le faltaba un brazo
Luego de recibir los restos en la morgue del Hospital San Vicente de Paúl, los organismos de socorro se percataron de que faltaba un brazo de Flor Elisa, por lo que tuvieron que volver al lugar de los hechos.
Hallaron el brazo aferrado a una tabla. Según vecinos, no se escucharon gritos ni alertas, y como la vivienda estaba en mitad de un gran solar rodeado de palos de café, cartón, botellas y otros elementos que recogían los ancianos en la calle, todo ello, al parecer, facilitó la propagación de las llamas.
Aunque comenzará una investigación para determinar las causas de la conflagración, los vecinos recordaron que la casa carecía de energía eléctrica, por lo que presumen que el origen pudo ser otro.
Amigos de lo ajeno
Vecinos del sector donde ocurrió el incendio afirman que en las noches se observan personas con linternas escarbando entre los escombros y buscando, al parecer, alguna pertenencia de valor, o algún dinero guardado.
Vivían de la caridad
Los Hermanos Lolita y José Cardona fueron llevados hasta donde un familiar. Según habitantes del sector, estos ancianos vivían de la caridad, aunque no molestaban a nadie. Pedían especialmente comida y ropa y raramente se les veía pidiendo dinero. Por eso manifiestan que ojalá les ayuden a reconstruir su casa.
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