LA PATRIA | MANIZALES

Elkin Emilio Suárez Soto, de 30 años, murió haciendo lo que más le gustaba: Trabajar en las minas. Este lunes festivo acudió a una explotación de oro, situada en la finca La Pelada, de la vereda El Bohío (Neira), para laborar como de costumbre.

Cuando ingresó a la mina, un derrumbe cayó desde la parte alta y lo sepultó. Pereció ahogado. Sus compañeros trataron de auxiliarlo, lo sacaron de entre la tierra, pero ya era demasiado tarde. Cuando Bomberos Neira llegó al lugar, situado a unas dos horas y media del municipio, no había qué hacer.

Otros mineros alcanzaron a salir a tiempo y se salvaron de sufrir la misma suerte de Elkin Emilio. En el lugar, de tradición minera, volvió a la memoria la tragedia de octubre del 2015, cuando murieron tres personas por inhalación de gases.

En ese época, LA PATRIA reportó la muerte de Alejandro Ladino, de 36 años, César Augusto y Arlex de Jesús Vinasco García, de 23 y 20 años. Al parecer el socavón colapsó y los gases afectaron a quienes estaban en lo profundo de él. Otras siete personas, que se encontraban en la parte de arriba, lograron salir. Ese año perecieron 30 personas en accidentes mineros en Caldas: 12 en Marmato y 15 en Riosucio.

Reciente

Este año van dos víctimas en el departamento. El accidente más reciente ocurrió la semana pasada en el sector La María, zona rural de Anserma. Allí murió Jorge Eliécer Aricapa Andica, de 34 años, al caer de una altura de unos 25 metros. En esa misma zona, sector Tintina, murieron siete mineros durante el 2017.