Menores, líderes y corrupción, entre las prioridades de la Fiscalía Caldas

LA PATRIA | MANIZALES

Tras asumir como Jefe Seccional de Fiscalías de Caldas, Liliana Castañeda Salazar describió un panorama de cómo recibe la institución, algunas prioridades y otros aspectos propios del cargo

¿Cuánto tiempo lleva de servicio en la Fiscalía?

15 años, en todos los cargos, desde asistente de Fiscal que fue cuando ingresé hasta este momento cuando el señor Fiscal General me encargó como Jefe Seccional de Caldas.

¿Los otros cargos cuáles han sido?

Fiscal local, fiscal seccional, fiscal especializada por encargo y fiscal delegada ante el Tribunal Superior también por encargo.

¿Cuáles es el panorama de la seccional Caldas?

Tenemos un personal y un grupo maravilloso de fiscales, asistentes e investigadores, muy competente como es la gente en Caldas y con mucho compromiso. El departamento es grande y aún así hemos sido destacados en resolver diferentes casos, como homicidios y delitos sexuales. Tengo muy buena expectativa con la seccional porque la conozco y los fiscales contarán con el acompañamiento de la dirección.

¿Cuáles son sus primeras tareas como directora?

Lo primero es darle un afectuoso saludo a los caldenses, que tengan la seguridad de que hay una directora que conoce el tema y con calidez humana para la gente del departamento. Los empleados y mis colegas encontrarán exigencia y disciplina así como respeto por quienes hacen parte de esta gran institución.

Su último cargo ha sido en la Unidad de Delitos contra la Administración Pública...

Ese ha sido mi fuerte desde recién ingresada a la institución. Estuve en Caquetá y en Caldas siempre he estado en la unidad anticorrupción.

¿Porque son tan prolongados esos procesos?

Ese tipo penal se denomina en blanco, lo que significa que debemos acudir a otras normas para darle trámite a esos procesos. Tenemos que mirar la Ley 80 de 1993 y decretos reglamentarios, observar con cuidado cómo se han hecho las licitaciones y la contratación. En Caldas tenemos como fortaleza nuestra policía judicial, la mayoría son profesionales y personas muy preparadas, lo mismo que los fiscales. Aún así son procesos muy dispendiosos porque dependiendo de la fecha de los hechos habrá que ubicar la norma vigente para ese tiempo.

Algunos tardan 10 años para llegar una decisión...

El sistema penal acusatorio da la posibilidad de aplazar audiencias, muchas son justificadas por defensores. Casi siempre son varios procesados y también varios los abogados. La Fiscalía pocas veces pide aplazamiento porque esa es la directriz que tenemos, excepto por fuerza mayor o caso fortuito. En general, no las podemos posponer porque entendemos la necesidad del departamento y de la comunidad de que haya respuesta en estos casos.

¿Qué se ha priorizado?

Las directrices del fiscal General son continuar trabajando por la comunidad que requiere justicia, como él lo indicó en su posesión; casos en donde los menores son víctimas; los delitos contra la administración pública y las amenazas a líderes.

¿Se vive la congestión en la Fiscalía como en los despachos judiciales de la parte penal?

Obviamente tenemos congestión, inclusive suele ser más, porque ahora hay que mantenernos actualizados en relación con las nuevas tecnologías. Se reciben denuncias virtuales, lo que ha representado mayor congestión. Hay personas que reportan hechos que no son delitos, pero igual hay que darle trámite a esa inquietud. Además, la implementación del acusador privado también aumentó la carga.

¿Continuará la implementación de la política de cero papel?

En la Fiscalía tenemos el proyecto Evoluciona que tiene aspectos muy importantes, entre ello está que poco a poco nos acostumbremos a que debe haber cero papel. Todos los medios y sistemas para trabajar nos lo permitirá.

CIFRAS

72 fiscalías

429 funcionarios

Por municipios

Los despachos de la Fiscalía en Caldas se ubican en Aguadas, Anserma, Supía, Riosucio, Salamina, Pensilvania, Samaná, Viterbo, Chinchiná, Neira, La Dorada y Manizales, con los que se cubren los 27 municipios.