
Q'HUBO | LA PATRIA | MANIZALES
Fabián Andrés Diosa Mejía murió ahogado en un charco de la quebrada Llano Grande, de la vereda Kilómetro 41. Al parecer el agua se lo tragó y los amigos no pudieron salvarlo.
El joven de 16 años salió el lunes en la mañana con su novia y unos amigos rumbo a un charco ubicado en la quebrada Llano Grande, con la idea de bañarse y a pasar un rato agradable. Pero las risas se convirtieron en lágrimas al mediodía al ver que Fabián se ahogaba y no podían hacer nada por rescatarlo.
Olimpo de Jesús Diosa Zapata, tío del joven, aseguró que Fabián siempre fue trabajador. En lugar de estudiar prefería ser agricultor y las labores en los trapiches de la región.
Ir a los charcos era lo que más le gustaba. "Él se fue con la novia y sus amigos a tirar baño. Ellos nos comentan que estaba en el charco, y que cuando menos pensaron lo vieron chapaleando. Se lo tragó el agua".
Intentaron salvarlo
Al parecer sus amigos trataron de cogerlo para evitar que se hundiera, pero fue imposible. Ya después, cuando pasó todo, como pudieron sacaron el cadáver.
A Olimpo le avisó una conocida y él de inmediato se presentó en el sitio, a 15 minutos del caserío de la vereda. Cuando llegó, el cuerpo de su sobrino estaba a la orilla. Con tristeza y sin más remedio, llamaron a la Policía para que llegara a inspeccionar el hecho.
Hasta allí llegó la Sijín para hacer la inspección técnica al cadáver, y el dictamen preliminar indica que Fabián Andrés murió por inmersión. La familia ahora espera la respuesta de la necropsia.
El dato
Fabián vivía con su mamá y sus tres hermanitos en una finca en el Kilómetro 41.
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