LA PATRIA | MANIZALES
“Si queda vivo es un milagro, las esperanzas son muy pocas”, eso le dijeron los médicos a los familiares del adolescente que recibió un tiro de su mejor amigo, supuestamente, en medio de un juego, en una vivienda de la Comuna Universitaria.
Los testigos dicen que antes del incidente, ya venían jugando con el arma, pero como no les pasó nada, se confiaron. Los días siguientes continuaron con el peligroso juego, pero el miércoles la situación se complicó.
Los dos jóvenes, de 16 años, cuando caía la noche, vieron pasar a la Policía. Atemorizados se entraron a la vivienda de uno de ellos y decidieron jugar a la ruleta rusa sin saber, al parecer, que el artefacto estaba cargado con dos balas. En medio del juego, disparó el revolver e impactó su cabeza.
Familiares y amigos de la víctima, en medio de la indignación, intentaron linchar al supuesto agresor que se ocultó al fondo de su casa, pero la Policía llegó a tiempo. Mientras que el presunto victimario gritaba desesperado: “!Fue sin intención, fue un accidente, yo no le haría daño a mi parcerito!”.
Mientras unos uniformados trasladaban al joven herido a un centro asistencial, otros ingresaron a la casa del joven armado y lo aprehendieron, al tiempo que buscaron el arma, pero todo apuntaba a que la encaletó muy bien, porque esculcaron en las viviendas aledañas infructuosamente.
“El menor dice que botó el arma en un solar vecino, es de calibre 32 y la seguimos buscando con detectores de metales”, contó el coronel Mario Fernando Guerrero, comandante de la Policía Metropolitana de Manizales.
La víctima es atendida en la Unidad de Cuidados intensivos del Hospital Infantil. “Lo iban a operar ayer (miércoles) para sacarle la bala, pero estaba tan delicado que si lo hacían se moría”, fue lo que le contaron los galenos a una de las familiares de la víctima.
Según Carlos Humberto Orozco Téllez, secretario de Salud de Manizales, el joven está en estado crítico, pero estable. Sufrió una herida en el cráneo que le produjo un edema cerebral, que requiere de un drenaje de sangre. Por ello, le instalaron un catéter en el cráneo para disminuir la presión cerebral. Hasta ayer en la mañana, familiares del herido permanecían en las afueras del centro médico sin saber cómo evoluciona su estado de salud.
Mientras el coronel Mario Fernando Guerrero llamó la atención a quienes guardan armas en sus casas para que no las dejen a la vista de los menores, personas cercanas a los involucrados en el hecho, contaron que esta es propiedad del menor al que, presuntamente, se le disparó.
Ante esa versión, el comandante dijo que si eso es así, denota una ausencia de atención de los padres de ese joven que andaba armado.
“La compró para defenderse porque tenía muchos enemigos. A él no lo quieren por acá, ha sido muy perjudicial”, contó un residente del sector.
Guerrero dijo también que es lógico que si se atrevía a llevar un arma de fuego, era porque no tenía conductas acordes con la sociedad. Este joven contaba con antecedentes por conflictos en la zona.
“Será llevado a un centro de resocialización para que sea intervenido psicológicamente y lo encaminenen, además para que los tutores estén pendientes de él, ya que la ley no permite la cárcel para estos menores, concluyó el coronel Guerrero.
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