LA PATRIA | MANIZALES
José Orley Gómez y Carlos Héctor Quintero terminaron condenados por hurto calificado y agravado, tras un robo en la casa del exdiputado Ferney Tapasco González.
El Juzgado Primero Penal del Circuito de Manizales los sentenció por hurto calificado y agravado. Absolvió a Jhon Wilson Arcila Arias y José Israel Aguirre Giraldo, este último defendido por el abogado Aristides Betancur Ciuffetelli.
El juez indicó que José Orley y Carlos Héctor sí participaron en el hurto a la residencia de la calle 69 N° 24-29, del barrio Palermo, de Manizales, el 26 de mayo de 2011. Quien soportó la situación fue la esposa de Tapasco González, Rosa Susana Triviño Velásquez.
Sin embargo, el político la desmintió durante su versión en el juicio, indicando que tendía a olvidar cosas, de lo que se valió la defensa de Carlos Héctor para buscar absolución.
“Esa fue la única prueba en contrario que hubo frente a los relatos de la señora, sin que además se aportara alguna historia clínica o diagnóstico médico que evidenciara el problema relacionado con su memoria o capacidad mental”, indicó el Juzgado.
James Alberto Zuluaga Marín fue condenado por este mismo robo, de manera anticipada, con aceptación de cargos. Le dieron 10 años. También quiso sacar en limpio a José Orley y Carlos Héctor.
En el robo, los ladrones se apoderaron de joyas por valor de $300 millones, más $4 millones en efectivo, según la misma víctima.
Los sujetos entraron a la casa de modo pacífico, aduciendo ser miembros de la Policía y enseñando una falsa orden de allanamiento, la cual fue encontrada en el suelo del inmueble durante la diligencia de inspección al lugar de los hechos.
Amenazaron a dos señoras que estaban dentro de la vivienda, las intimidaron con arma de fuego, las amarraron y empacaron los elementos hurtados. Las mujeres se lograron desatar y llamaron a las autoridades.
Los señalados, desde el 8 de junio pasado, efectuaron la reparación integral a la víctima, quien se mostró satisfecha con la indemnización, lo que permite disminuirles las penas. Quedaron, para cada uno, en 5 años, 7 meses y 15 días.
Quintero, quien vive en Villamaría, aportó documentación para demostrar que es padre cabeza de familia y se le concedió la domiciliaria. Pagó ya una condena de 5 años y 7 meses por homicidio. Gómez sí debe ir a la cárcel.
El abogado de José Orley Gómez apeló de la sentencia.
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