LA PATRIA | MANIZALES
A José Héctor Jaramillo Martínez, de 56 años, lo asesinaron dentro del bar Reminiscencias, de su propiedad. El hombre realizaba una remodelación en el negocio.
Era la 1:20 de la tarde del jueves cuando lo balearon y murió en el sitio. Al parecer el propietario esperaba la llegada de unos trabajadores para abrir el establecimiento a las 3:00 de la tarde.
Sin embargo, cuando estos llegaron a las 2:00 de la tarde se dieron cuenta del hecho y lo vieron tirado. En ese momento había mucha gente que se acercó a la escena.
Testigos dicen que el hombre llegó temprano y que se le veía entusiasmado por las mejoras que estaba haciéndole al bar, para que las mujeres que trabajan allí tuvieran más privacidad.
Cuentan que en el momento de la balacera José Héctor estaba arreglando un bafle. La víctima cayó en la entrada al bar, donde quedó la sangre que perdió.
Poco a poco el lugar se llenó de curiosos y llegaron los familiares para reconocer el cuerpo de Jaramillo. Según el reporte de la Policía, murió de tres disparos, en la cabeza, el tórax y el antebrazo derecho, aunque los vecinos dicen que escucharon cuatro o cinco detonaciones.
El informe de inspección del cadáver indica que el hecho ocurrió en la calle 8 con carrera 9, cerca del reconocido Bar Gambrinos, que tiene su propio historial de homicidios cometidos dentro de ese establecimiento (ver recuadro Sector violento).
Los familiares aseguran que no tenía amenazas ni problemas con nadie, pues era un hombre simpático, noble, que lo único que hacía era ser buena gente con todos.
También era dueño del Café San Julián, ubicado en el sector de La Galería de Chinchiná.
José Héctor Jaramillo vivía en unión libre, tenía tres hijos y dos hijastros. “Era un buen papá, buen esposo, buen hermano, y un hombre correcto”, comentó su hijo, Julián Jaramillo.
"Mi hermano era bueno. Estamos anonadados con lo que pasó, pues no entendemos porqué le hicieron eso", dijo una hermana y agregó que está indignada con las apreciaciones que se están haciendo. "La Policía me preguntó que si él vendía droga. Eso es falso, mi hermano odiaba a los viciosos e incluso los sacaba del bar cuando se le metían".
Recuerda que lo último que él le dijo era que se cuidara de los ladrones. "No quería que nada malo me pasara", concluyó la hermana. La familia espera que las autoridades esclarezcan el crimen y se sepa la verdad.
Sus vecinos y clientes lo definieron como una persona amable, atento para atender su clientela y servicial, por eso no se explican qué razón tuvieron los asesinos para acabar con su vida.
La velación de Jaramillo Martínez la realizaron hasta ayer en la Funeraria La Aurora. La misa de exequias fue en la Basílica Menor de Nuestra Señora de las Mercedes.
En el mismo sector donde queda el Bar Reminiscencias también queda el Bar Gambrinos, donde han ocurrido varios homicidios:
*El 11 de febrero pasado asesinaron con disparos y puñaladas a Óscar Giraldo, administrador del bar.
*El 10 de octubre del 2006 asesinaron al entonces administrador del negocio Miguel Ángel Hoyos Toro, de 24 años.
*El 2 de diciembre de 2009, dentro del bar apuñalaron hasta causarle la muerte al soldado profesional Luis Aníbal Zapata Arteaga, de 38 años.
El uso de este sitio web implica la aceptación de los Términos y Condiciones y Políticas de privacidad de LA PATRIA S.A.
Todos los Derechos Reservados D.R.A. Prohibida su reproducción total o parcial, así como su traducción a cualquier idioma sin la autorización escrita de su titular. Reproduction in whole or in part, or translation without written permission is prohibited. All rights reserved 2015