LA PATRIA | MANIZALES

"Era el centinela, nos cuidó siempre. Murió en su ley", dijo Henry Pineda, a quien los dueños de lo ajeno le robaron, pero antes le envenenaron a Rocky, el rottweiler que fue la compañía de su familia durante tres años.

El caso ocurrió ayer en la finca La María, de la vereda Llanitos de Villamaría. Pineda explicó que se levantaron y se dieron cuenta de que hurtaron en la casa contigua, que es de su hermano, pero que pertenece al mismo predio.

"Se llevaron cinco televisores de diferentes pulgadas y un computador de mesa. Pero lo más triste es que nos envenenaron a Rocky. Estamos muy conmovidos", dijo.

El señor explicó que la finca consta de dos casas: la suya y la de su hermano, que a la vez es su socio. En la noche del miércoles Rocky ladraba sin parar, pero lo vieron como normal. Ya en la mañana de ayer, al ver el perro tirado, se dieron cuenta de que algo había pasado. En la tarde revisaban la casa para mirar si los dueños de lo ajeno se llevaron más cosas. "Metros adelante, por la carretera, había unos costales vacíos", explicó.

Sobre el mediodía se enteraron de que Dulce, una perrita pincher de la finca, también fue envenenada, pero la pudieron salvar.

Recordó que hace tres años les robaron unas herramientas y que hace dos intentaron hurtarles unas fumigadoras. Reconoció que el sector es seguro, pero manifestó su tristeza por ser víctimas de estos hechos, teniendo en cuenta que en su finca cafetera les dan empleo generalmente a 30 o 40 personas.

Sospecha

Luego de la diligencia de las autoridades, se indicó que las sospechas arrancan desde los mismos empleados de la finca.