LA PATRIA | MANIZALES
La vida del vallecaucano Carlos Humberto Torres pasó de estar llena de prosperidad a la tristeza. Fue víctima de las Farc en San Vicente del Caguán (Caquetá), perdió a su esposa y a dos hijas a manos del grupo guerrillero, desconoce el paradero de su hijo y la mayor falleció en España pensando que él estaba muerto.
Pero sigue en la búsqueda del muchacho y dice que es lo único, que a sus 68 años, lo tiene sacando fuerzas. Héctor Fabio Torres Giraldo tenía 14 años en el 2000, cuando ocurrió el triple homicidio. Al parecer, los guerrilleros se lo llevaron hacia el monte.
Carlos Humberto, quien nació en Tuluá, recordó que hizo parte del Ejército, pero la muerte de un compañero le generó un trauma que lo obligó a salir de la institución. Luego conformó su hogar con Fanny Giraldo, con quien tuvo cuatro hijos.
Era propietario de dos tractomulas y dice que las ganas de obtener más dinero lo llevaron hasta San Vicente del Caguán. Pero su pasado militar lo condenó, una persona lo delató con las Farc y llegaron los días más dolorosos.
Un día arribaron los delincuentes a cargo de Tomás Medina Caracas, el negro Acacio, y lo secuestraron por un mes. Lo señalaron de ser informante del Ejército, lo que negó.
Luego lo llevaron hasta su vivienda y lo torturaron frente a su familia. Su pequeña de 11 años, Claudia Patricia, se quiso oponer y la respuesta fue un disparo de fusil en la cabeza. Al ver eso, Fanny intentó acercarse a su esposo y a su hija, pero dos balas acabaron con su vida.
Humberto se desmayó producto de ocho impactos. Lo trasladaron a hospitales de Bogotá y Cali, requirió de rehabilitación física y psicológica. Durante cuatro años luchó contra sus heridas y pasó de una silla de ruedas a caminar sin asistencia.
Luego supo que ese mismo día a su hija María Mercedes la raptaron, la violaron, la torturaron, la asesinaron y la dejaron abandonada. Su cuerpo lo encontraron días después.
Pero había otras personas por quienes necesitaba vivir. Su hija Sandra Patricia se escapó de la muerte porque vivía en Sucre, llegó a Manizales y conoció a un hombre con quien se casó y se fue a vivir a España.
El año pasado, LA PATRIA publicó la historia de Humberto y su intención de encontrarla, pero un conocido le contó que un cáncer la afectó y falleció. Sin embargo, guarda la esperanza de encontrar a Héctor Fabio, ojalá vivo.
Espera
Carlos Humberto trabaja sobre la carrera 20, cerca del parque Ernesto Gutiérrez, tiene un puesto de dulces.
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