La muerte de Hans Tafur, en San Diego (Samaná) fue un atroz crimen

LA PATRIA | LA DORADA

Al dolor por la muerte del Hans Esleider Tafur se sumó el desalentador dictamen de Medicina Legal: al niño, de 7 años, lo abusaron sexualmente y posteriormente lo asesinaron.

El secretario de Gobierno de Caldas, Carlos Alberto Piedrahíta, sostuvo inicialmente que podría tratarse de un accidente, y solo ayer, 24 horas después, se tuvo certeza de las causas del crimen.

“Medicina Legal evidenció que tiene tres lesiones con arma cortopunzante que le afectaron pulmones y corazón, y también heridas en los genitales, que es un acceso carnal violento”, declaró Piedrahíta.

Para investigar este caso, el secretario dijo que se solicitó a la Fiscalía designar un fiscal destacado. Se espera que pronto se obtengan resultados y se capture al responsable. Ya se tendría evidencia, que está en custodia.

Pidió a los padres no descuidar  a  sus hijos, porque existen “personas malvadas que pueden atentar contra ellos”.

El coronel Necton Lincoln Borja, comandante de la Policía de Caldas, añadió que las autoridades departamentales ofrecen una recompensa de $40 millones para quien ofrezca pistas para dar con el responsable.

Sobre la hipótesis que se manejó de un posible accidente, aclaró que ante los indicios iniciales era lo que se pensaba y por eso se tuvo mesura hasta obtener el dictamen de Medicina Legal. Un equipo de investigadores de Bogotá llegará a reforzar la labor.

“Queremos justicia”
Los doradenses salieron ayer a acompañar a Hans Esleider hasta su última morada. En la tarde marcharon detrás del vehículo que transportaba el féretro, al tiempo que coreaban, acompañados de globos blancos: “Queremos justicia”.

El entierro estaba previsto para las 11:00 de la mañana, pero la madre del niño manifestó que quería compartir un tiempo más con él. Hacia las 2:00 de la tarde salieron desde el Parque de Los Novios, en el barrio Las Ferias, con destino a la parroquia Espíritu Santo.

A las 4:00 de la tarde, luego de una hora, los doradenses llegaron junto al carro fúnebre. Hans era aficionado al fútbol e hincha de Nacional y hasta su bóveda lo acompañó un balón. Allí soltaron los globos, en medio de los sollozos de asistentes y familiares.

Sin sospechosos

De acuerdo con las primeras investigaciones, existen pruebas importantes, como la linterna encontrada junto al cadáver, pero las autoridades sostuvieron que se debe tener calma mientras avanzan las investigaciones.

La desaparición

Hans vivía en La Dorada con sus padres y visitaba a su abuela en el corregimiento de San Diego (Samaná). Desapareció el pasado sábado en la noche, luego de rezar la novena. Un obrero lo encontró el miércoles al lado de una quebrada, en estado de descomposición.