
LA PATRIA | MANIZALES
Hay un capturado por la muerte violenta de José Nelson Restrepo Cardona, ocurrida a las 5:22 de la tarde del domingo 7 de marzo pasado en la carrera 22 con calle 22, del centro de Manizales.
La víctima, habitante de calle, recibió ese día seis disparos (cinco en el rostro). Quienes lo conocieron indicaron que no era agresivo y por eso no se explican por qué lo asesinaron de esa manera. Era paciente psiquiátrico y se la pasaba por el Centro, Galería y Plaza Alfonso López.
“El único pecado de José Nelson era tocar los timbres de las residencias y escapar. Recorría diariamente el Centro Histórico y a nadie incomodaba, incluso reclamaba una ayuda, de manera discreta, sin atosigar a su ´clientela´. Se advertía que no era normal, pero de allí no pasaba. Vivía con una hermana en La Pelusa. Un ser humano como él, no merecía morir así”, relató un conocido.
Dependía de su mamá por una condición mental. Hasta que ella murió. Dejó de estudiar y se quedó en las calles. Se convirtió en un personaje de San José. Saludaba a quienes conocía y siempre recordaba los nombres.
La captura
José Nelson era hermano del exalcalde de Copacabana (Antioquia). Lo que conocieron las autoridades luego de las pesquisas y de revisar videos es que el sicariato lo cometieron dos personas. En cámaras se vio la moto en la que escaparon.
La pareja asesina durmió en un hotel del centro de la ciudad, a escasos metros donde mataron al habitante de calle.
Media hora después de ultimar a la víctima, se comunicaron con la recepción del alojamiento para preguntar si habían encontrado un celular que se les quedó en la habitación. Este fue clave para la investigación, pues los sujetos no lo recogieron, pese a que les dijeron que ahí estaba.
Las autoridades extrajeron la información, hallaron unas fotos del posible indiciado y pudieron determinar su identidad. Los sicarios, al parecer, llegaron el 5 desde Medellín para cometer el crimen dos días después.
Uno de los números encontrados en la información que arrojó la extracción del celular del hotel coincidía con uno que un ciudadano (capturado) le había dado a la Policía en Medellín cuando lo capturaron, semanas atrás, por fuga de presos en esa ciudad.
Así, investigadores del CTI se desplazaron a Medellín y establecieron que este sujeto, días después del ataque sicarial en Manizales, fue capturado allí por un caso de fleteo, proceso en el que quedó privado de la libertad por hurto calificado y agravado.
En audiencia no aceptó cargos por el crimen. Se desconoce qué motivó esta muerte.
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